No hay mucho tiempo que perder y ahora son varias las marcas las que han tenido que comprobar que su estrategia comercial y de producción cuentan con importantes problemas que han hecho que no se puedan llevar a cabo sus nuevos modelos. Este es el caso de Maserati que ha tenido que hacer un alto en el camino en su proceso de fabricación con uno de los nuevos coches que cuentan con una combustión eléctrica, como es el caso del futurible nuevo Quattroporte eléctrico que llegará en los próximos meses a nuestras calles, siempre que sean capaces de solucionar sus problemas.
La firma italiana ha tenido que cambiar sus planes y ahora han comenzado a trabajar en encontrar una buena alternativa para seguir con su estrategia de producción a gran escala y adentrarse en el terreno eléctrico y de la movilidad sostenible. Ahora, según ha informado en Corriere Torino, han dejado en el aire la renovación del tradicional Quattroporte con una versión completamente eléctrica. Eso sí, según se ha podido conocer hay varias crisis internas en cuanto a la producción de este nuevo modelo, el cual no tendría una clara estrategia a corto plazo.
En ese sentido, se ha podido conocer que tienen varias dudas en cuanto a la reposición de las marcas Alfa Romeo y Maserati, por lo que se ha tenido que cambiar sus estrategias. Por ello, se ha podido conocer que en Alfa Romeo han intentado modificar sus necesidades con una berlina eléctrica que podría tener una potencia de 1000CV.
Un correo eléctrico
Ha sido mediante un correo electrónico a todos sus proveedores para tranquilizarles cuando se ha conocido que han tenido que suspender temporalmente su producción: «los futuros Maserati serán desarrollados, diseñados y producidos 100% en Italia y adoptarán motores eléctricos«. Eso sí, también habían enviado una notificación solicitando una reducción de los costes de las piezas del 6%, algo que ha sentado mal a sus proveedores. Ahora, toca ver qué sucederá finalmente con el futuro del Quattroporte eléctrico, que iba a comenzar a producir a gran escala en el 2024 para salir al mercado al principio del 2025.
