El McMurtry Spéirling, se trata de un pequeño hipercoche eléctrico que batió el récord de la subida a Goodwood el año pasado. Con el expiloto de F1 Max Chilton al volante, este cohete ecológico completó el recorrido en 39,08 segundos.
El simpático monoplaza rebajó en 0,8 segundos el antiguo mejor tiempo establecido por Romain Dumas con el Volkswagen ID.R en 2019. A finales del año pasado, lo vimos acelerar de 0 a 96 km/h (60 mph) en apenas 1,4 segundos.
Ahora, McMurtry Automotive se complace en anunciar que la pequeña bestia eléctrica entrará en producción, aunque con una tirada limitada a sólo 100 coches, que serán entregados a sus clientes en 2025. a un precio de 960.000 dólares.
Por ese importante desembolso, se obtendrá un pequeño vehículo eléctrico de pista con un chasis monocasco de fibra de carbono. Mide sólo 3,45 metros de longitud, 1,58 de anchura y apenas 1,02 de altura. A pesar de ser tan bajo, puede acomodar a conductores de hasta 2 metros de altura y 150 kilogramos de peso, gracias a los pedales y el volante ajustables.
Su asombrosa potencia de 745 kW (1.013 CV) se combina con un peso inferior a los 1.000 kilos, con lo cual las aceleraciones tienen que ser dignas de un vehículo preparado para ‘drag races’.
El modelo actual monta llantas más pequeñas, de 18 pulgadas y más ligeras que las de 19 pulgadas del año pasado, y neumáticos slick más anchos, de 270 mm delante y 300 mm detrás. El pack de baterías de 60 kWh de capacidad puede cargarse en sólo 20 minutos y durará 10 vueltas a Silverstone a pleno rendimiento.
McMurtry Automotive ha realizado retoques adicionales en la suspensión, la carrocería y la aerodinámica, al tiempo que ha ajustado la arquitectura eléctrica, los frenos, el chasis y la unidad de dirección asistida para reducir masa. Ahora cuenta con una transmisión mejorada, una batería más ligera de nuevo desarrollo con mejor gestión térmica y la opción de ABS.
