En la madrugada del 24 de diciembre falleció Rodolfo Amado Sobko. “Rody”, como todos lo conocían, fue ex detenido político, testigo y querellante en causas de lesa humanidad en el Chaco. También fue funcionario provincial y un activo defensor de los derechos de los pueblos indígenas, con una recordada intervención durante el histórico acampe contra el gobierno de Roy Nikisch en 2006.
En la madrugada del pasado 24 de diciembre falleció Rodolfo Amado Sobko. Tenía 78 años. “Rody”, como todos los conocían, era médico pediatra, fue funcionario del Ministerio de Salud del Chaco durante el primer gobierno de Jorge Capitanich. Detenido político y testigo en tres juicios por crímenes de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura cívico milita en el Chaco. Su testimonio, en la causa “Caballero II”, fue una de las claves para reconstruir parte de lo que ocurrió con el matrimonio de Sara Fulvia Ayala de Morel y Pedro Morel en la Brigada de Investigaciones de Resistencia, a mediados de 1977.
Sobko, víctima y testigo de los crímenes de la dictadura
Durante el período como preso político, Sobko fue torturado en reiteradas ocasiones y sometido al menos a dos simulacros de fusilamiento en la exBrigada de Investigaciones de Resistencia y también en la Alcaidía Policial, dos de los centros de clandestinos de detención de la última dictadura cívico militar en la capital del Chaco por los que pasó desde su detención, en mayo del 1977.
El testimonio de Sobko fue clave para reconstruir el paso por la exBrigada de Investigaciones de Sara Fulvia y Pedro Morel, formoseños y militantes del PRT, con quiénes compartió tiempo de cautiverio. En su declaración en la causa Caballero II, Sobko reveló que Sara y Pedro “estaban convencidos de que iban a terminar desaparecidos”.
“Luego de la Brigada nunca más los vimos, ni en el juzgado federal ni en las distintas cárceles por las que pasamos”, relató. En su narración, recordó que “a Fulvia la conocí en el año 75, 76, cuando estaba en el hospital de “La Madre y el Niño”, que apareció con su hija de un año y medio, ella buscaba a su esposo”.
“Recuerdo que Fulvia sufría en su celda, y Pedro Morel gritaba tratando que se interrumpan las agresiones hacia ella, era una destrucción psicológica”, reveló Sobko, en 2018, ante el Tribunal Oral Federal de Resistencia. El testimonio de Sobko fue central para que el represor Albino Borda también sea condenado por el abuso sexual contra Sara Fulvia Ayala, lo que fue considerado como delito autónomo en el contexto de crímenes de lesa humanidad.
El apoyo a la lucha indígena
El compromiso social de Rody no pudo ser acallado por el terror militar. Tras la vuelta de la democracia fue un activo militante por los derechos de los pueblos indígenas y tuvo una participación central en las protestas de las comunidades que se movilizaron masivamente contra el gobierno radical del Chaco en 2006, cuando Roy Nikisch era gobernador y Hugo Matkovich, ministro de Gobierno y Seguridad. En aquella ocasión, un grupo de dirigentes indígenas encabezados por Egidio García tomaron durante 33 días el 4º piso de la Casa de Gobierno reclamando asistencia a las comunidades de El Impenetrable. Paralelamente, se instaló un acampe en la Plaza 25 de Mayo, frente a la sede de la Gobernación.
Todo derivó en el dictado de una medida cautelar por parte de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, aún vigente. Sobko fue uno de los interlocutores entre los manifestantes indígenas y los medios de comunicación, entre ellos el portal de noticias CHACODIAPORDIA.COM.
Su paso por la función pública
Tras la vuelta del peronismo al gobierno, se desempeñó como Director de Salud Indígena del Ministerio de Salud Pública del Chaco durante la primera gestión de Jorge Capitanich como gobernador. En este cargo, representó a la provincia en encuentros nacionales sobre salud intercultural y ha comparecido ante la Legislatura para explicar políticas destinadas a comunidades originarias.
Durante su paso por la gestión pública, impulsó la formación de agentes sanitarios de los tres pueblos indígenas de la provincia (Qom, Wichí y Moqoit), incorporando la perspectiva de salud intercultural.
En diciembre de 2013, recibió el Premio de Derechos Humanos “Amanda Mayor de Piérola”, otorgado por el Poder Legislativo del Chaco en reconocimiento a su compromiso y militancia.
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