En el peronismo hay enojo por la decisión del Juzgado Federal con competencia electoral que encabeza Ramos Padilla, que ya avisó que no dará marcha atrás con la medida. Incertidumbre por el nivel de participación del 7 de septiembre
La publicación de los padrones electorales para la elección del 7 de septiembre en la provincia de Buenos Aires, que —en algunos casos— incluyó como novedad los cambios en lugares de votación, impacta en la hoja de ruta del gobierno de Axel Kicillof. Alertado por los intendentes, el gobernador elevó un pedido al juez con competencia electoral, Alejo Ramos Padilla, para que dé marcha atrás con la reorganización de los lugares de votación. Este martes el magistrado rechazó la solicitud. A partir de un extenso informe de la Secretaria Electoral que depende de su juzgado se alegó: “No existe posibilidad material alguna de retrotraer la distribución de mesas para replicar lo acontecido en 2023, toda vez que se trata de un padrón de electores diferente, con diferente composición en cuanto a la cantidad de mesas de cada circuito electoral y numerosa cantidad de locales que han variado su condición o bien no existían en anteriores elecciones”. Además, se aclaró que en el convenio tripartito que firmó el ministerio de Gobierno bonaerense, junto al Juzgado y la Junta Electoral, los cambios en los lugares de votación aparecían como una posibilidad.
Al ser una elección desdoblada, la ejecución de los comicios bonaerenses están bajo potestad de la Junta Electoral bonaerense y del ministerio de Gobierno provincial, que encabeza Carlos Bianco. Sin embargo, ambos organismos firmaron un acuerdo tripartito para darle participación al Juzgado Federal con competencia Electoral de La Plata, comandado por Alejo Ramos Padilla. Fue el Juzgado el que dispuso —parado sobre la gimnasia electoral que ostenta— los lugares de votación. Los mismos mostraron algunos cambios que se visualizaron cuando los electores empezaron a consultar dónde votar en el mes de septiembre.
“Puede ser que algunos voten un poquito más lejos, pero la gran mayoría va a votar más cerca. Por eso que lo primero que se escucha es aquello que perciben y siente, que se le generó un cambio que los perjudica, pero en la masividad, ¿sí?, van a votar más cerca”, planteó Ramos Padilla en declaraciones a Radio Provincia. El magistrado detalló también que todos los años no electorales se hace un relevamiento de los lugares que están en condiciones de llevar adelante procesos electorales. Para estas elecciones, por ejemplo, se dieron de baja 151 locales que fueron utilizados en elecciones 2023, en virtud de que no se encontraban aptos para ser afectados para estas elecciones 2025. “Para garantizar un buen desarrollo del proceso electoral se han dado de baja locales que funcionaron con autoridades de mesa y fiscales trabajando a la intemperie durante toda la jornada electoral, ello debido a datos que no habían sido reportados en elecciones anteriores”, esgrime la respuesta de la Justicia.

Ramos Padilla también advirtió que la provincia “hace un mes y medio”, pidió colaboración para llevar adelante las elecciones “que nunca en estos cuarenta años de democracia las había llevado adelante”. Puso en la discusión la complejidad de todos los cambios de forma y tiempo electoral sucedidos desde diciembre del año pasado hasta hace meses. Algo que también se evidencia en el informe que este martes llegó a la Gobernación
“Nos pidieron un plan de escuelas y este es el plan de escuelas que tenemos para las elecciones nacionales del 26 de octubre. Es decir, la gente va a votar en el mismo lugar. Esto es lo que tenemos para dar y en estas condiciones, ¿sí?. Nos pidieron colaboración, el plan de escuela y si podíamos llevar adelante el escrutinio definitivo, si le podíamos organizar las urnas y la logística”, remarcó Ramos Padilla. De todo eso se hará cargo su juzgado. La vicegobernadora, Verónica Magario, salió al cruce al describir los cambios como “nefastos”, puntualizando que la mayoría de las modificaciones se dieron en la Tercera sección electoral, uno de los núcleos duros del peronismo y donde la también titular del Senado bonaerense será primera candidata a diputada provincial.
El oficio de dos páginas que la semana pasada, Kicillof envió a Ramos Padilla plantea que “cuando resta poco más de un mes para la realización de los comicios, resulta prácticamente imposible notificar a cada votante sobre esta modificación”
“De esta manera, probablemente, muchos electores, cuando se presenten a emitir el sufragio donde lo hacían habitualmente, se encontrarán con el cambio en el sitio de votación, conspirando así contra su voluntad de votar”.
Las acciones y la proximidad al acto eleccionario alteraron los ánimos dentro del peronismo e incluso parecieron en los últimos días asomar nuevamente ciertas ríspideces por cómo viene desarrollándose el escenario electoral en la provincia de Buenos Aires. “Nos encontramos en un berenjenal. Al desdoblar la elección, los que tienen competencia son la Junta y el ministerio de Gobierno. Firmaron un convenio con el Juzgado federal y el Juzgado fue el que determinó estos cambios y quien manda a la gente dónde votar. Tendría que haber una consulta al ministerio de Gobierno. No ocurrió. Es raro y sin posibilidad de modificarlo”, advirtió la senadora provincial de Unión por la Patria, Teresa García, consultada por Radio 10. García es una de las voces políticas de la expresidenta Cristina Kirchner para los posicionamientos en el devenir bonaerense y quien durante la discusión por el desdoblamiento electoral planteaba su negativa al cambio de fecha.

Cómo seguir
En este escenario, el gobierno de Axel Kicillof, traza algunas estrategias para fomentar la participación. Si bien es incierto si la baja concurrencia a las urnas es funcional en términos de estrategia al oficialismo o a la oposición; a las campañas en medios de comunicación y redes sociales ya desplegadas por la gestión bonaerense, en los próximos días harán un “puerta a puerta” y despliegue de mesas en la vía pública. “Se van a habilitar lugares de consulta de padrón para aquellas personas que no pueden o no saben acceder por la vía digital”, aseguran en La Plata.
En todo el sistema político prima una interrogación: cuánta gente concurrirá a votar el próximo 7 de septiembre. “Es imposible saber de cuánto será la participación”, aseguran cerca Kicillof ante la consulta de Infobae. La tendencia basándose en las elecciones provinciales y locales -como la de concejales en Rosario- que hasta el momento sucedieron este 2025 no son auspiciosas y es un mapa que tienen sobre la mesa en gobernación.
En la Ciudad de Buenos Aires, por ejemplo, las elecciones a legisladores -en las que se impuso el vocero presidencial Manuel Adorni- la asistencia fue del 53%, cuando el promedio histórico siempre estuvo cerca del 77%. Los comicios, como sucederá el mes que viene en territorio bonaerense, también fueron desdoblados.
En la elección a concejales de Rosario, la participación no llegó al 50%; fue del 48,1%. En Salta, donde se votó con el sistema de Boleta Única de Papel, la asistencia fue del 58%. La provincia de Jujuy mostró una participación del 63%; San Luis, 60,5% y en Chaco, 52,1%.
