El tenista italiano había despedido a Umberto Ferrara y a su fisioterapeuta Giacomo Naldi cuando se hicieron públicos los controles positivos.
Jannik Sinner tomó una extraña decisión ya que anunció que volverá a trabajar con Umberto Ferrara, el preparador físico al que había despedido a mediados de 2024, después de dar positivo en un control antidoping.
“Jannik Sinner contrató a Umberto Ferrara como preparador físico con efecto inmediato”, comunicó Avima, la empresa que representa al reciente campeón de Wimbledon.
Sinner estuvo suspendido durante tres meses por el uso de una sustancia llamada clostebol, que adujo consumir de manera accidental, sin intención de sacar ventaja deportiva.

El caso generó un gran revuelo en el tenis con algunos jugadores denunciando que los positivos fueron anunciados de manera tardía (efectuados en marzo de 2024 y sin ser públicos hasta agosto de ese año).
El origen accidental de la contaminación fue admitido por las autoridades antidopaje y la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), que castigó a Sinner con una suspensión acordada con él y reducida a tres meses, de febrero a mayo de 2025.
Durante ese parate, Sinner despidió a Umberto Ferrara y a su fisioterapeuta Giacomo Naldi cuando se hicieron públicos los controles positivos.

El comunicado indicó también que la decisión de contratar de nuevo al preparador físico fue tomada “de pleno acuerdo con el equipo de dirección de Jannik y en el marco de la preparación (…) para el Masters 1000 de Cincinnati y el US Open”.
“Umberto ha tenido un papel importante en el desarrollo de Jannik”, subrayó la empresa.
En los últimos meses, Sinner trabajó con Marco Panichi, ex preparador físico de Novak Djokovic, y con el fisioterapeuta Ulises Badio. Justo antes de Wimbledon, el tenista italiano anunció el final de su colaboración con ambos.
Qué dijo Ferrara sobre el uso del clostebol
Según el diario deportivo La Gazzetta dello Sport, Ferrara reconoció en abril que utilizaba “desde hacía años” un spray que contenía clostebol “para tratar una patología crónica”.
“No se lo di a Naldi, le sugerí que lo utilizara para curar un corte que no cicatrizaba y que complicaba su trabajo. Fui muy claro al hablarle de la naturaleza de ese producto y sobre que en ningún caso debía entrar en contacto con Jannik”, se defendió en aquel entonces.
