El fútbol te regala momentos únicos tanto dentro como fuera de la cancha. Con la doble fecha de Eliminatorias ya consumada, Lionel Messi se dirigía a la salida de la concentración cuando un hincha le hizo un particular regalo: canilleras personalizadas con imágenes de Messi y sus títulos con la Selección argentina. La reacción del “10″ quedó capturada y se hizo viral.
Se trata de Tomás Machuca (@tomimachuca_ en TikTok), un rosarino de 17 años que creó Fenikks, un emprendimiento dedicado a la fabricación de canilleras con plástico reciclado. “20 tapitas = Un par de canilleras. Comprá un par y donamos otro en potreros de todo el país. Cuidando al planeta, barrio por barrio”, dicta su lema.
Y uno de sus sueños más grandes era que Messi conociera su producto. Fue así que logró captar su atención a la salida del estadio y pudo darle el presente.
“Leo, te puedo dejar un regalo, por favor”, le dijo Tomás apenas lo vio. Lo que no se imaginó fue la reacción del 10 de la Selección argentina, que quedó registrada frente a las cámaras.
El astro argentino quedó cautivado por el diseño de las canilleras y se las mostró a Rodrigo De Paul, que iba caminando a su lado.
“Si ya me pareció una locura el simple hecho de habérselas dado, miren lo que fue la reacción. El mismísimo Lionel Andrés Messi con el que tanto tiempo soñamos con llegar, presumiendo las canilleras a De Paul. Con la humildad y sencillez que lo caracteriza fue un momento de mucha emoción. Nos dejó sin palabras”, relató el joven durante el video que compartió a través de su cuenta de TikTok.
El dibujo muestra a la Pulga en sus tres consagraciones de la Copa América, la Finalissima y la más importante, el Mundial de Qatar 2022. “De Rosario al mundo” es la frase que dicta el diseño gráfico elaborado por el Estudio 89 y que luego selló en las canilleras de plástico, Fenikks.
En su emprendimiento, Tomás explica a través de las redes sociales cómo es el proceso de elaboración.
Primero seleccionan las tapitas a utilizar y separan las del mismo color. Luego son trituradas por una máquina especial y llevadas a un molino para su proceso de limpieza. Finalmente, a través de una inyectora, se transforman y pasan de ser un residuo a canilleras.
Para su terminación, en la parte de atrás, utilizan PVC, un material blando para amortiguar los golpes que puede recibir el jugador. “Ya están listas para salir a jugar y protegerte a vos y al planeta de un rival rústico como la contaminación”, explica.
