Los conciertos de Taylor Swift han disparado el gasto en hoteles y tiendas de ropa en su gira europea, según datos proporcionados por Mastercard Spending Pulse.
Las actuaciones en Madrid, por ejemplo, coincidieron con un aumento del 31 % en el gasto interanual de hoteles y un 35 % en el de las tiendas de ropa, de acuerdo con la entidad, que mide las ventas minoristas en tienda y ‘online’ a través de todas las formas de pago.
Con la llegada de cientos de miles de “swifties” a la capital española, los restaurantes registraron un incremento en las ventas del 16 % y los establecimientos de venta de accesorios de moda una subida del 19 %, en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Tras los conciertos de Madrid, Taylor Swift continuó su gira por la ciudad francesa de Lyon y Edimburgo. En el primer caso, el gasto en hoteles y alojamientos registró un aumento del 118 % respecto al 2023; y en la restauración el incremento fue del 23 %.
En cuanto a la capital escocesa, el crecimiento en las ventas de la hostelería fue del 26 % y en el sector hotelero, del 29 %.
“La gira de Taylor Swift, que comenzó en mayo en Europa, ha generado importantes beneficios económicos en todo el continente, de forma similar a sus otras actuaciones en todo el mundo”, indicó Natalia Lechmanova, economista jefe para Europa, Oriente Medio y África del Instituto Económico de Mastercard.
Según la experta, esta gira de la cantante estadounidense ha demostrado que “eventos musicales de esta envergadura pueden ser muy beneficiosos para la economía local”.
Estilo Taylor en el escenario
Tras el éxito de The Eras Tour en América, Asia y Oceanía, Taylor Swift volvió a los escenarios este año en Europa. La primera parada fue París, Francia, y el show estuvo lleno de sorpresas que incluyeron nuevos vestuarios de diseñadores de lujo. Uno de los looks más impactantes es un body con cristales firmado por Versace, similar a los que venía usando pero en una nueva combinación de colores rojos y naranjas, que para la segunda canción combinó con unas botas de Christian Louboutin a tono.
Otro de los momentos más fashionistas fue el de la cantante luciendo un minivestido de flecos y brillos de Roberto Cavalli, pero esta vez en dorado y negro.
