El nombramiento de Francisco Sánchez como nuevo secretario de Culto generó polémica. El ex diputado se expresó en contra del Papa y adhirió a teorías antisemitas.
Sánchez se hizo conocido hace un tiempo pidió adoptar la pena de muerte en la Argentina y señaló que debía aplicársele a Cristina Kirchner.
El neuquino es muy cercano a Patricia Bullrich, con quien comparte posiciones extremas. Por haber pedido la pena de muerte contra Cristina debió retractarse, pero su nominación es seguida se cerca por la Iglesia y por la comunidad judía. Es que Sánchez deberá administrar los vínculos del Estado con todos los cultos.
En agosto del año pasado apuntó contra el papa Francisco. «Caso para estudiosos encontrar un papa que haya hecho tanto daño», dijo enojado por el nombramiento de Raúl Zaffaroni en una secretaría vaticana.
Meses antes protagonizó una polémica entrevista con la activista de derecha Delfina Meza, que se hace llamar Wagner, igual que el músico favorito de Adolf Hitler.
En la entrevista Sánchez adhiere a teorías antisemitas y menciona a George Soros, a «los Rotschild» y a los «Rockefeller» y «otra gente muy poderosa tomando decisiones sobre las libertades individuales».
