Barby Franco se horrorizó al ver el aumento del precio de la carne: “¿Esto es real?”

Barby Franco se horrorizó al conocer los ajustes sobre los precios de la carne, cuya dramática suba pareció impactar directamente en su ánimo. Alarmada por el contexto, subió a sus redes la noticia que le sirvió como fuente y que además proyectaba el precio final del producto.

“¿Esto es real?” escribió sobre la imagen la modelo, quien no podía dar crédito a la información que se podía leer en su captura de pantalla: “El kilo de carne subió 44% en la hacienda y podría llegar los 12 mil en los comercios”.

Sin embargo, y pese a la brutal impresión que recibió, Barby optó por no profundizar demasiado sobre el tema, y en el resto de las stories de Instagram, prefirió crear una dinámica de preguntas y respuestas para interactuar con sus seguidores.

No es la primera vez que la mediática enfrenta choques de realidad de esta naturaleza. Hace unos meses, reportó un par de situaciones incómodas que vivió mientras visitaba supermercados para realizar compras hogareñas.

Sus opiniones por aquellos días generaron algunas reacciones por parte de sus seguidores, entre quienes la apoyaban y criticaban su posición sobre el tema, al considerar que sus apreciaciones venían desde un lugar de privilegio, muy alejado de la realidad de otras personas con situaciones peores que la suya.

La divertida reacción de Sarah Burlando cuando sus papás la llevaron a jugar al mar

Barby Franco y Fernando Burlando decidieron embarcarse con destino a Uruguay y escogieron la exclusiva localidad de Punta del Este para pasar un divertido fin de semana junto al mar. En esta ocasión, su bebita de casi un año, Sarah Burlando, se convirtió en la absoluta protagonista de varias fotos y videos que sus orgullosos padres subieron a sus respectivas redes sociales.

Pero dentro de la secuencia de imágenes, hubo un gran momento estelar que sin duda destacó entre el resto: cuando el letrado se inclinó para que los pies de Saritah hicieran contacto con el agua, tan agradable le resultó que cuando su papá la llevó fuera, ella comenzó a llorar. Burlando cedió ante el llanto de su hija y ni bien se devolvió hacia las olas, ella inmediatamente comenzó a reír y chapotear, provocando las risas de su mamá.

Una escena similar se repitió cuando le tocó el turno a Barby para jugar con la bebé. Instintivamente, cada vez que Sarah veía el agua aproximarse, movía las piernitas en un intento por “correr” para alcanzar el suave oleaje de la orilla. Su risa iluminó cada segundo de la hermosa escena madre- hija.