“No creo que eso sea punk”: La batalla de Hayley Williams por mostrar el sexismo en el rock alternativo

Hayley Williams es una valiente representación de la importancia de las mujeres en el rock, demostrándolo en varias ocasiones.

A principios de los dos mil, una rama del punk se suavizó en busca de algo más sentimental que pegara con la juventud, la cual quería verse representada una vez más, de manera más variada. Fall Out Boy, My Chemical Romance, Simple Plan y Paramore entre otras, alcanzaron la fama absoluta en este contexto.

Esta última banda siempre tuvo una gran diferencia. Esa era que su voz principal no solo era mujer, sino que fue una que creció frente a nosotros, teniendo que enfrentar las desigualdades críticas y vulneraciones que esto significa. Hayley ha sido constante en sus intentos por mostrar que estos actos de sexismo suceden. Necesario en un lugar tan dominado por hombres como lo es el rock y la música alternativa.

Las agresiones contra de Hayley Williams

A veces es difícil de recordar, debido a su presencia dominante y empoderada, pero Williams comenzó extremadamente joven, a los 14 años. Similar a estrellas como Billie Eilish, la vida de Hayely fue notoriamente publica y, si miramos los contextos de principios de los 2000, la cultura del punk rock era mucho menos consciente socialmente.

Es en estos contextos donde agresiones verbales eran lanzadas constantemente hacia ella, como una «broma». Una de ellas, fue la que reveló para Vulture. «Estábamos de gira con Taking Back Sunday, estábamos en su autobús. Uno de sus amigos dijo algo sobre mi vagina. Tenía literalmente 16 años, a punto de cumplir 17. Todos se reían. Nadie le prestó atención», declaraciones que recién en 2020, compartió.

Lo cierto es que el machismo performativo era pan de cada día en una escena pop punk y emo que crecía cada vez más, sin mucho control. Otra instancia importante fue cuando Paramore se separó en 2010. Una instancia en donde a Hayley se le tildó de controladora, dictadora y totalmente culpable por la salida voluntaria de los hermanos Farro. Debido a esto, se tomó un largo descanso alejada de la música.

El denuedo para hablar de la intérprete de Missery Buisness tardó mucho en desarrollarse. Encargándose solo recientemente de verbalizarlas, esperando que no se vuelvan a repetir. Una de las más polémicas declaraciones en su contra fue cuando se enfrentó al vocalista de NOFX, el llamado Fat Mike.

En el festival When We Were Young, lo que se buscaba era rememorar la infancia de muchos con el movimiento emo. Algo que para las mujeres en dicha escena, no era el jolgorio de la bonanza que el evento quería pintar como único sentimiento.

En esto Hayley fue sincera para Billboard: “Todo el mundo estaba tratando de recordar días mejores, y yo estaba ahí sentada como: No fueron mucho mejores”. Ampliando sobre esto y haciendo hincapié en el vocalista señalado: “Ahora nos tratan como un premio, pero Fat Mike solía decirle a la gente que daba buenos lengüetazos en el escenario, como lo hizo conmigo».

Terminándolo todo con: «No creo que eso sea punk, no hay nada que conmemorar allí». Una mujer que ha enfrentado bastantes reparos debido a ser contestataría, inspirada y, por consecuencia, constantemente cuestionada por su posición de fama.

Además de música que muchos aman, el legado de Paramore también reside en la intrínseca relación de Hayley Williams con la sinceridad, ya sea con base en su depresión, sus batallas con el desamor o el hecho de ser una mujer en un contexto poco amable en sus inicios.