El secretario general del Sindicato de Canillitas, Eduardo Baser, describió con preocupación la realidad que atraviesa el sector, al celebrarse el Día del Canillita. “Somos los últimos dinosaurios, y cada vez quedamos menos”, afirmó.
En 7AM explicó que la crisis económica y la falta de renovación generacional profundizaron el declive del oficio: “nuestros clientes tienen más de 70 años y muchos ya se nos fueron; lo mismo pasa con los compañeros canillitas”.
Según Baser, la actividad sufrió un golpe irreversible tras la pandemia. “Antes éramos 200 canillitas en Resistencia; hoy quedamos 70. Y de 120 kioscos de revistas, apenas siguen en pie siete”, detalló.
Agregó que en varias localidades del interior el diario dejó de llegar porque “no conviene salir a vender tres o cuatro ejemplares que no alcanzan para vivir”. También señaló que los altos costos de impresión, dolarizados, hacen inviable la continuidad de la actividad.
El dirigente cuestionó la falta de respuestas del Estado. “Presentamos proyectos para que se declare patrimonio cultural al kiosco de diarios y para eximirnos del impuesto a la vía pública, pero el expediente duerme hace dos años”, denunció.
Contó además que ni el gobernador Leandro Zdero, ni el intendente Roy Nikisch los recibieron: “nunca pedimos planes, pedimos trabajo. Lo único que sabemos hacer es trabajar, pero parece que el Estado nos discrimina”.
Baser comentó que la desregulación dispuesta por el gobierno nacional agrava la situación del gremio. “El presidente Milei desreguló nuestra actividad por decreto. Presentamos un amparo, porque ya queda muy poco por defender”, dijo.
Pese al panorama adverso, insistió en que buscan alternativas, como permitir que los kioscos incorporen servicios complementarios. “Queremos adaptarnos, pero por cada propuesta aparecen diez mil excusas”, resumió.









































