El cuerpo de María Susana Rodríguez Iturriaga fue hallado atado de manos y pies. La fiscalía investiga a siete acusados detenidos, que habrían formado parte de una organización criminal dedicada al robo de casas.
Los vecinos de San Isidro están conmovidos por el brutal asesinato de una mujer de 81 años durante un asalto en su casa, en la localidad bonaerense de Acassuso. “Podía haber vivido 20 años”, lamentó su sobrina en diálogo con TN.
El hallazgo del cuerpo ocurrió el jueves luego de que la familia de María Susana Rodríguez Iturriaga, perdió contacto con ella. Por ese motivo, su sobrina y su cuñado entraron a la casa para saber qué había pasado.
“Me llamó la vecina para avisarme que estaba la Policía tocándole la puerta porque tenía una ventana abierta. Fui con mi papá y vimos que todo estaba dado vuelta”, contó Marina, la sobrina, en diálogo con TN. “La escena fue espantosa. Estaba atada con una sábana de manos y pies, y acostada en el piso en medio de un charco de sangre”, sumó.
Según contó la mujer, su tía era una persona “súper activa, sana y sólida”. “Podía haber vivido 20 años”, lamentó. Sin embargo, señaló que no salía mucho y que vivía sola, un detalle que pudo haber sido de interés para los delincuentes.
“La casa está llena de rejas, pero al parecer la tenían marcada”, indicó Marina. También mencionó que el año pasado ya había sido asaltada y que le habían robado joyas y dinero en efectivo.

Los policías investigan un homicidio criminis causa en ocasión de robo. La autopsia confirmó que Rodríguez Iturriaga llevaba varios días muerta, ya que el crimen ocurrió en la noche del sábado 25 de octubre.
Cuatro jóvenes de 19, 20 y 26 años fueron detenidos en la noche del jueves luego de un intento de robo en otra casa. Los sospechosos forman parte de la “Banda del Millón”, una organización delictiva bajo investigación por múltiples asaltos en Zona Norte.
Esa misma madrugada, en un operativo paralelo en el municipio de Tigre, allanaron el domicilio de un quinto integrante de la banda, quien también fue detenido. Este sospechoso ya había sido demorado en septiembre por la Patrulla Municipal de San Isidro, lo que desencadenó una investigación de la Fiscalía de Martínez en colaboración con las fuerzas de seguridad municipales, la Policía Bonaerense y el Centro de Monitoreo de Tigre. Luego, dos personas más fueron arrestadas.
Los investigadores creen que la banda operaba con la colaboración de miembros recluidos en el Penal 57 de Campana, que marcaban las casas a robar y mantenían comunicaciones desde la cárcel durante los delitos.
La causa está bajo la investigación de la Fiscalía de Martínez.















































