La mujer estuvo detenida siete horas y quedó desempleada tras un error que la marcó para siempre.
La Justicia sobreseyó a la vicedirectora de una escuela en Tupungato que había sido detenida a principios de agosto acusada injustamente de distribuir material de pedofilia en Internet por un video que, en realidad, había creado su nieta para sumarse a un reto viral. Aún así, en diálogo con TN la docente afirmó: “La pesadilla sigue. Siguió y todavía no termina”.
Después de más de un mes de investigación y un giro inesperado en la causa, la mujer ya fue desvinculada por completo del expediente pero continúa apartada de su cargo sin goce de sueldo.
“He perdido mi vida, estoy tratando de reconstruirla”, lamentó con una mezcla de angustia e impotencia. Y agregó: “No sé si mi postura es de reclamo, pero sí necesito volver a trabajar. Volver a mi vida, que está en pedazos”.
Por su parte, Juan Franco Ferraris, el abogado que la representa, apuntó: “La Dirección General de Escuelas (DGE) manifiesta que el sumario administrativo va a continuar, que mi defendida tiene que presentar testigos. Pero la medida no tiene ningún tipo de pertinencia y utilidad, ella ya fue sobreseída porque el hecho no ocurrió”.
“Estuvo en una celda, con el guardapolvo y esposada”, sostuvo el abogado de la docente
Todo empezó con una alerta de Google que detectó un intento de cargar un video con supuesto contenido de pedofilia a YouTube. La cuenta y el teléfono desde donde se registró la actividad estaban a nombre de la docente. Ese fue el día que todo cambió para ella, de manera abrupta y dolorosa.

La mañana de la detención, la mujer llegó a la escuela como todos los días. De repente, una persona vestida de civil se le acercó y preguntó por la vicedirectora. Cuando se identificó, el policía le pidió que entregara sus pertenencias y lo acompañara frente a toda la comunidad educativa.
“Fue algo desmedido, ella estuvo en una celda con el guardapolvo y esposada”, resaltó Ferraris a este medio. Ya en el patrullero, la presión arterial se le disparó y en ese estado pasó varias horas en un calabozo de la comisaría 20. “No entendía nada y nadie me decía por qué yo estaba en esa situación”, señaló la docente.
“Ni siquiera habían pedido antecedentes penales de la docente. Lo que tuvo el fiscal para mandar a detenerla fue la vinculación del correo electrónico”, apuntó su abogado, que desde el primer momento pidió que su defendida declare ante la Justicia.
Y fue en esa indagatoria, cuando se reveló una verdad inesperada: la que aparecía en el video era la nieta de la mujer, de 11 años, bailando y mostrando partes de su cuerpo.
Un reto viral y una verdad inesperada
Aunque el video nunca llegó a subirse por los filtros de YouTube, el intento quedó registrado y fue suficiente para que la investigación apuntara a la vicedirectora. Sin embargo, la causa dio un giro cuando el padre de la nena –hijo de la docente– entregó el celular desde el cual se había tratado de subir las imágenes.
“Era un teléfono viejo, en desuso, que estaba guardado en un cajón y la niña lo utiliza para filmarse e intentar subir ese video a YouTube”, reconstruyó el abogado Ferraris, sobre cómo se inicia la investigación internacional encabezada por Google en Estados Unidos que llevó hasta la casa de la vicedirectora.
Y cuestionó: “Lo único que coincidía era un correo electrónico pero entonces podría haber sido cualquier persona en esa casa. O incluso, si ella hubiera perdido el teléfono y lo usa alguien para subir ese material, también hubiese sido detenida”.

Con el avance de la investigación, la declaración de la menor en cámara Gesell terminó de esclarecer lo ocurrido. La nena confesó que ella misma había grabado el video, imitando un reto viral que había visto en otras compañeras del colegio.
Así, quedó descartada cualquier intención de la abuela de publicar contenido pedófilo.
Suspendida, sin sueldo y esperando justicia
Con todos estos elementos, el juez Fernando Ugarte dictó el sobreseimiento de la docente en una audiencia judicial exprés. No hubo discusión posible: el propio fiscal pidió que la desvincularan del expediente.
Pero a pesar de que se comprobó que la responsable fue su nieta, la vicedirectora sigue suspendida de sus funciones y sin cobrar su sueldo.
Además, la docente tuvo que soportar un ensañamiento con ella en las redes sociales después de que se hiciera pública la noticia. “Hubo un grave perjuicio (en contra de su defendida), es una comunidad muy pequeña”, señaló Ferraris.
Por su parte, la docente lamentó: “Siento que el sistema educativo, al cual yo pertenezco desde hace 23 años, no me ha apoyado en ningún momento. No me ha ayudado, no me ha cuidado”. “Para mi ha sido eterno todo este proceso”, concluyó.
