El texto condena “la distribución de ayuda a cuentagotas y el asesinato inhumano de civiles, incluidos niños, que intentan satisfacer sus necesidades más básicas de agua y alimentos”

El Reino Unido y 24 aliados, entre ellos Australia, Canadá, Francia e Italia, declararon el lunes en un comunicado conjunto que la guerra en Gaza “debe terminar ya”, argumentando que el sufrimiento de la población civil ha alcanzado nuevas cotas.
“Instamos a las partes y a la comunidad internacional a unirse en un esfuerzo común para poner fin a este terrible conflicto mediante un alto el fuego inmediato, incondicional y permanente”, añadió la agrupación en el comunicado.
La declaración, difundida este lunes, subraya la urgencia de poner fin a la violencia y denuncia el impacto devastador que la guerra ha tenido sobre la población civil palestina. Los firmantes, en un mensaje unificado, sostienen que “la guerra en Gaza debe terminar ahora”, una exigencia que, según el texto, responde a la gravedad de la situación humanitaria y a la escalada de sufrimiento entre los habitantes de la Franja.
“El sufrimiento de los civiles en Gaza ha alcanzado nuevas cotas”, afirmaron los Ministros de Asuntos Exteriores de veinticinco países y el Comisario de la Unión Europea para la Igualdad, la Preparación y la Gestión de Crisis en una declaración conjunta que exige el fin inmediato de la guerra en la Franja de Gaza.

La contundente afirmación, respaldada por representantes de Australia, Austria, Bélgica, Canadá, Dinamarca, Estonia, Finlandia, Francia, Islandia, Irlanda, Italia, Japón, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Países Bajos, Nueva Zelanda, Noruega, Polonia, Portugal, Eslovenia, España, Suecia, Suiza y el Reino Unido, así como por el alto funcionario europeo, marca un hito en la presión internacional para detener el conflicto que asola la región desde octubre de 2023.
Los firmantes critican la entrega de ayuda “a cuentagotas” y denuncian el asesinato de civiles, incluidos niños, que intentan acceder a recursos básicos como agua y alimentos. La declaración enfatiza: “Es horroroso que más de 800 palestinos hayan muerto mientras buscaban ayuda”, una cifra que ilustra la magnitud de la crisis y que, de acuerdo con la declaración, representa una consecuencia directa de las restricciones impuestas por las autoridades israelíes.
La denuncia de la privación de asistencia humanitaria esencial se acompaña de una exigencia clara: “La negación por parte del gobierno israelí de asistencia humanitaria esencial a la población civil es inaceptable. Israel debe cumplir con sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario”, sostienen los ministros y el comisario europeo.
La declaración también aborda la situación de los rehenes capturados por Hamas durante el ataque del 7 de octubre de 2023. Los ministros y el comisario europeo expresan su condena a la detención de estos rehenes y exigen su liberación inmediata e incondicional.

“Los rehenes cruelmente retenidos por Hamas desde el 7 de octubre de 2023 siguen sufriendo terriblemente. Condenamos su detención y exigimos su liberación inmediata e incondicional”, afirman en el texto. Además, consideran que un alto el fuego negociado representa la mejor esperanza para poner fin al sufrimiento de los rehenes y de sus familias.
La protección de los civiles y el respeto al derecho internacional humanitario constituyen otro eje central de la declaración. Los firmantes hacen un llamado a todas las partes involucradas en el conflicto para que cumplan con sus obligaciones legales y rechazan de manera tajante las propuestas de trasladar a la población palestina a una “ciudad humanitaria”.
Según el texto, “las propuestas de trasladar a la población palestina a una ‘ciudad humanitaria’ son totalmente inaceptables. El desplazamiento forzado permanente constituye una violación del derecho internacional humanitario”.
La declaración también rechaza cualquier iniciativa que promueva cambios territoriales o demográficos en los Territorios Palestinos Ocupados.
Los firmantes expresan su oposición al plan de asentamientos E1 anunciado por la Administración Civil de Israel, advirtiendo que, de implementarse, “dividiría en dos el Estado palestino, lo que constituye una flagrante violación del derecho internacional y socava gravemente la solución de dos Estados”.
Además, denunciaron la aceleración de la construcción de asentamientos en Cisjordania, incluida Jerusalén Oriental, y el aumento de la violencia de los colonos contra la población palestina. “Mientras tanto, la construcción de asentamientos en Cisjordania, incluida Jerusalén Oriental, se ha acelerado, al tiempo que la violencia de los colonos contra los palestinos se ha disparado. Esto debe cesar”, subrayan los ministros y el comisario europeo.
La declaración conjunta representa una de las manifestaciones más amplias de preocupación internacional por la situación en Gaza y los Territorios Palestinos Ocupados desde el inicio de la actual escalada del conflicto.
Los firmantes instan a las partes y a la comunidad internacional a unirse en un esfuerzo común para poner fin al conflicto mediante un alto el fuego inmediato, incondicional y permanente. “Un mayor derramamiento de sangre no sirve de nada. Reafirmamos nuestro pleno apoyo a los esfuerzos de Estados Unidos, Qatar y Egipto para lograrlo”, afirman en el texto, reconociendo el papel de estos países en la búsqueda de una solución negociada.
