La modelo brasileña Lygia Fazio murió este miércoles a los 40 años por un derrame cerebral. Hacía tres semanas que se encontraba hospitalizada. Su familia asegura que todo fue provocado por una cirugía estética en la que se aplicó silicona industrial y PMMA en los glúteos.

“Amigos, desgraciadamente nuestra guerrera ha cruzado al otro lado”, se lee en el mensaje escrito por los familiares a través de la cuenta oficial de Instagram donde reunía casi 100 mil seguidores.

“Pronto comunicaré aquí los horarios de su despedida. Agradecemos una vez más todo el apoyo. Les pido que entiendan nuestro momento, no podemos contestar todos los mensajes. Además, la información de lo sucedido ya ha sido explicada aquí. No viene al caso explicar todos los detalles ahora. Respeten nuestro dolor”, concluyeron.

La modelo era mamá de dos nenes, Davi y Thor, a quienes recientemente les había dedicado un tierno posteo. “Mi universo masculino. Mis ángeles que me dieron la fuerza para vivir. Mis eternos hijos que amo mucho. Doy mi vida por ustedes”, había escrito en una publicación junto a una foto de los pequeños.

Lygia Fazio había tenido problemas con cirugías anteriores

Desde que comenzó en el modelaje, Lygia Fazio se obsesionó por tener una cola grande. Sin ir más lejos, en una entrevista que brindó en 2022, aseguró que las modelos tenían la misma meta: “Todo el mundo quería tener el culo más grande que el otro”.

Después de hacerse un primer retoque, la modelo decidió ir por más, pero lo hizo en un lugar clandestino. “El producto parece ‘moverse’ en el cuerpo, baja a las piernas. En mi caso, se fue a los lados. Así que tuvieron que extirpármelo, me hicieron una incisión en forma de corazón”, había explicado.

Lygia tuvo muchos problemas de salud por las cirugías. En 2022, pasó más de 100 días en el hospital para retirar rellenos de varias partes de su cuerpo. Sin embargo, ella definió su postura como de “autocuidado”.

“El autocuidado es importante para todos, independientemente del sexo, la edad o la posición social. Las personas que mantienen la práctica del autocuidado tienden a ser más productivas, eficientes y a tener pensamientos positivos. Todo porque cultivan una relación consigo mismas”, escribió en un posteo.