Al frente de Merci, crea colecciones con prendas versátiles y elegantes que vende en todo el país, Uruguay y México. “El lino y la seda son los protagonistas de este verano“ asegura.
Dicen que la moda es una forma de contar sin hablar, y cuando eso sucede, se nota. Natalia Graciano, que dejó el modelaje para abocarse al cuidado de los dos hijos que tuvo con Matías Martin (hoy de 18 y 16 años), vuelve a estar más vinculada que nunca al mundo de la moda.
Merci, una marca inspirada en su estilo personal
Hace ya más de 10 años que Natalia Graciano creó Merci, una marca de moda que sin dudas refleja su estilo relajado pero sin perder de vista la elegancia y la sensualidad. Hoy se siente más libre que nunca y eso salta a la vista al echar un vistazo a su última colección.
“Mi inspiración en cada temporada siempre es profunda a nivel personal. Este verano fue Solstice, que simboliza un momento de transformación donde la luz alcanza su máximo potencial marcando una oportunidad para soltar, renovar y re alinearse con la energía de la naturaleza”, explica la rubia, que hace poco más de un año se separó del periodista.
Bajo esta premisa, las prendas fueron creadas para un contexto de libertad y celebración que al mismo tiempo se entrelaza a la perfección con su impronta. “Mi estilo propio es relajado y descontracturado, evoca libertad. Me gusta jugar con las prendas y me encanta cuando se logra la armonía perfecta entre el sentir y el vestir. Merci propone elegancia, sensualidad y comodidad”.
Otro pilar que representa a la marca es la versatilidad y atemporalidad de las prendas, que le ganan a la tendencia. “La tendencia me atraviesa, no me impone. Tomo ciertas propuestas, las que realmente me identifiquen y las adapto a mi estilo, al estilo de la mujer Merci. No soy una fashion victim para nada, suelo incorporar de la moda lo que me atraviesa e identifica”, asegura.
En esta búsqueda de crear piezas que trascienden fronteras temporales, Graciano cuenta que también apuesta a la reinterpretación de las prendas. “Muchas veces hago un mix entre dos prendas que amo”, comenta la ex modelo que ahora también posa con sus prendas.
“En muchas ocasiones, el diseño surge a partir de piezas existentes que ya tienen una esencia especial. Nos enfocamos en realizar pequeñas modificaciones estratégicas […]. Es un proceso que llamamos el upgrade de la prenda, donde lo conocido se eleva a un nivel nuevo, adaptándose a la evolución del estilo y la esencia de la marca”, agrega.
Estética y funcionalidad que trascienden fronteras
En el proceso creativo, los géneros también juegan un papel fundamental. Dicho sea de paso, son los protagonistas de las distintas propuestas de la temporada. “Los linos para el día. Las sedas para la noche, también combinadas con encaje”, dice sobre los infaltables de este verano. Y agrega los tejidos y el mix de texturas.
“Cada prenda está trabajada partiendo de la idea de combinar estética con funcionalidad. Prendas eternas, elegantes y versátiles que conviven en tus guardaropaa en perfecta armonía. La comodidad es una premisa fundamental”.
Y aunque todo parece soñado en su espacio en Palermo, donde exhibe sus creaciones, también es el resultado de mucho sacrificio y un arduo trabajo. “Merci es un sueño que comencé hace 10 años. Mi elección fue ponerle todo mi tiempo y aprendizaje. No es fácil llevar sola una empresa adelante. Di mucho de mí. Es un desafío muy grande”, sostiene.
Pero el desafío continúa y Graciano está decidida a seguir expandiendo Merci por el mundo. La marca se vende en 20 locales del interior del país, en México y este año llegó por primera vez a Uruguay “Está expansión me da mucha felicidad. Y muchos proyectos que ya ire contando! Muchos proyectos muy lindos por suerte”, concluye con entusiasmo.
