En medio de la actividad de la terminal aérea, y cuando el actor chileno se disponía a viajar a su país natal junto a los hijos que tienen en común, la inesperada escena de la expareja captó las miradas de pasajeros. La tensión escaló mientras la multitud aguardaba un vuelo internacional
El lunes pasado a las 16:30, en el Aeroparque Jorge Newbery de Buenos Aires, Eugenia “La China” Suárez y Benjamín Vicuña habrían protagonizado un altercado en público. Según la panelista Estefi Berardi, quien compartió la información en el programa Mañanísima, la discusión fue intensa y tuvo como motivo el olvido, por parte de Suárez, del permiso necesario para que su hijo menor, Amancio, pudiera viajar con su padre a Chile.
Testigos en el lugar señalaron que ambos discutían en voz alta, situación que incomodó a Vicuña, quien le pidió a Suárez bajar el tono debido a la atención que estaban generando. La tensión se agravó cuando la actriz confrontó a una persona que estaba filmando el incidente. Según Berardi, Suárez se acercó “de mala manera” para exigir que dejaran de grabar, reflejando la incomodidad por el escrutinio público.
La discusión entre La China Suárez y Benjamín Vicuña en Aeroparque tuvo como eje central la falta de un documento imprescindible: el permiso de viaje para su hijo menor, Amancio. Este requisito es obligatorio para que un menor de edad pueda salir del país con uno de sus padres sin la presencia del otro, y al haberlo olvidado Suárez, se generó la disputa.
La situación fue resuelta en el mismo aeropuerto, donde ambos padres se presentaron en el área de migraciones para gestionar un permiso de urgencia. Este tipo de trámite es posible realizarlo únicamente si ambas partes están presentes, lo que permitió que Vicuña finalmente pudiera abordar su vuelo a Chile junto a su hijo. Según relató Estefi Berardi, de no haber estado Suárez en el lugar, el viaje hubiera sido imposible, complicando aún más el panorama.
En paralelo a los hechos en Aeroparque, se generó otro tema que involucra a Eugenia “La China” Suárez, relacionado con su convivencia temporal con las hijas de Wanda Nara y Mauro Icardi, Isabella y Francesca. Según se deduce de imágenes publicadas en redes sociales, Suárez habría compartido tiempo con las niñas en la casa del futbolista en Nordelta, conocida como la “casa de los sueños” de Wanda.
La convivencia generó preocupación en Wanda Nara, quien desde hace semanas observó cómo se viralizaban imágenes de sus hijas paseando con La China en Nordelta. Este episodio añade un nuevo capítulo a la compleja relación entre los involucrados, dejando entrever dinámicas familiares que continúan siendo objeto de atención mediática.
Disputa judicial entre Wanda y la China
El conflicto legal entre Wanda Nara y la China Suárez se centra en una demanda por daños y perjuicios presentada por la actriz. Según trascendió, la querella fue motivada por afirmaciones públicas realizadas por Wanda en programas televisivos como los de Susana Giménez y Ángel de Brito (LAM), que habrían afectado la reputación profesional y personal de la actriz.
El equipo legal de la China Suárez, liderado por Agustín Rodríguez, está solicitando un resarcimiento económico que supera los 200 mil dólares. La audiencia de mediación se llevará a cabo el próximo 12 de febrero a las 11 de la mañana mediante una reunión virtual por Zoom. Este encuentro será decisivo para definir si las partes logran alcanzar un acuerdo extrajudicial o si el caso avanzará hacia los tribunales.
La China Suarez iniciara acciones legales contra Wanda Nara: la palabra de su abogado
La intensa exposición mediática de Wanda Nara sigue marcando su vida personal y profesional, alimentada por las filtraciones y el escrutinio constante. Recientemente, se divulgaron chats privados de Mauro Icardi que revelaron comportamientos polémicos, relacionados además con pericias psicológicas realizadas por ambas partes en el contexto de su conflicto judicial.
Según el abogado de Wanda, la pericia psicológica de su clienta se encuentra disponible en el expediente, pero la correspondiente a Icardi no ha sido presentada, a pesar de haberse realizado con una diferencia de solo dos días.
Estos eventos han colocado a Wanda en el centro de las noticias, con implicancias que afectan no solo su imagen pública, sino también su estabilidad emocional. Su equipo legal busca manejar cuidadosamente las tensiones, mientras que ella enfrenta el desafío de equilibrar su vida familiar con la atención constante de los medios.