Tras la apertura de retiros voluntarios para todos los empleados de la TV Pública, la gestión libertaria se anotició de que licenciar a la mayor parte del personal iba a ser muy caro y dieron marcha atrás. Además, lanzaron una búsqueda de un contador «experiencia previa en gestión de procesos de retiros voluntarios».
Javier Milei había anunciado el cierre de la emisora, pero los libertarios volvieron sobre sus pasos. Después de meses de enlatados comenzaron a contratar figuras. Desembarcaron Luli Fernández, Denise Dumas y Martiniano Molina, aunque por ahora el público no acompaña la propuesta diseñada por Len Cole y el titular de RTA Eduardo González.
No parece haber un plan: semanas atrás se anunció la apertura de retiros voluntarios para los empleados con un 20% de «gratificación» para hacer más tentadora la oferta. Después de circular la información, los directivos de la TV Pública entraron en pánico.
Las autoridades del canal, algunas de ellos provenientes del albertismo, cayeron en cuenta que el proceso iba a costarle muy caro a las arcas públicas y, temerosos de la furia de Casa Rosada, limitaron la cantidad de gente que podía anotarse.
Por las dudas, además, se lanzaron a la búsqueda de un contador. «Capacitado en liquidaciones laborales. Tener experiencia previa en gestión de procesos de retiros voluntarios», son de las condiciones excluyentes.
La última información es que los retiros solo están disponibles para aquellos empleados que tengan menos de 15 años de antigüedad en la emisora.
«Tienen que dejar de nombrar gente y esperar que las cosas decanten solas. Hay muchos que están tramitando su jubilación. Pero se apuraron y ahora tuvieron que recalcular», explicó a LPO un viejo funcionario de la TV Pública.
