Quiere encabezar la boleta de la provincia de Buenos Aires, mientras toma fuerza la candidatura de Ofelia Fernández como diputada nacional por CABA.
Tras amenazar con romper con Fuerza Patria y competir como candidato a diputado por fuera del peronismo, Juan Grabois se mostró en un acto de campaña junto a Máximo Kirchner, en la Universidad Nacional de Lomas de Zamora, mientras negocia lugares en las listas para dirigentes de Patria Grande.
El dirigente social reclama encabezar la lista a diputados nacionales por la provincia de Buenos Aires, pero también quiere que Ofelia Fernández lidere la de la Ciudad de Buenos Aires.
Tanto Grabois como Fernández fueron duros críticos de la situación actual del peronismo. La exlegisladora porteña incluso cuestionó la unidad y avisó que no iba a militar la boleta de Fuerza Patria, pero luego bajaron el tono.
Representan a uno de los espacios que quedaron relegados de los mejores lugares de las listas que compitieron en mayo para la renovación de la Legislatura porteña, y de las que se presentarán para las elecciones de septiembre, para los cargos de la Legislatura bonaerense, y no quieren volver a perder para las generales de octubre.
¿Ofelia Fernández candidata?
A diferencia de la provincia de Buenos Aires, el peronismo porteño acordó una amplia unidad en un clima de bajas tensiones. Sin embargo, tiene deudas para pagar a las fuerzas minoritarias que quedaron fuera de los lugares “entrables” de las listas.
La Cámpora reclama encabezar la boleta a senadores nacionales y ese lugar tiene nombre: Mariano Recalde. Las negociaciones están avanzadas y es un puesto casi asegurado.
Para la de diputados nacionales el escenario no está tan claro, pero en los últimos días tomó fuerza la idea de reservar el primer o segundo lugar en la lista a Ofelia Fernández. El acuerdo cerraría con Matías Lammens completando la dupla. Ambos dirigentes tienen muy buena relación y vienen a levantar la bandera de la renovación.

Una de las principales críticas de Fernández es justamente que los dirigentes históricos no dejan paso a las nuevas generaciones, que no se sienten representadas por la vieja forma de hacer política.
Además, aunque fueron por fuera del peronismo en las elecciones de mayo, tras la confirmación de la condena de Cristina Kirchner, otros dirigentes volvieron a acercarse y se sumaron al armado bonaerense. Ahora, el PJ porteño tiene que incorporarlos en algún lugar de las boletas, entre ellos los espacios representados por Guillermo Moreno y Juan Manuel Abal Medina.
Si el objetivo de mínima es que ingresen un senador y tres diputados, las bancas disponibles no alcanzan para conformar a todos. Sobre ese escenario se sustentan las negociaciones actuales.
Negociaciones en un clima de tensiones
Si bien Grabois quedó dentro del armado peronista, su pelea con Sergio Massa recrudeció en las últimas semanas. El enojo por el armado de listas lo dejó al borde la ruptura.
El dirigente social ya mostró que no tuvo miedo a presentar una interna, pese a que lo acusan de haber favorecido el triunfo de Javier Milei en 2023, por eso, la advertencia que hizo este año encendió nuevamente las alarmas.
Según pudo saber TN, si Grabois decide competir por fuera de Fuerza Patria, el massismo pediría bajar a sus candidatos de las listas bonaerenses. La amenaza está latente, pero aún hay puentes de negociaciones abiertos y muy activos.
Máximo Kirchner, muy cercano a Massa, le bajó el tono a la confrontación y compartió escenario en la UNLZ. “Las singularidades en las representaciones no tienen que poner nervioso a nadie, son parte del proceso de la construcción política”, dijo, con Grabois sentado a su lado.
El líder de La Cámpora no quiere que Grabois compita por afuera, pero tampoco le preocupan las diferencias internas. De hecho, suele marcar las suyas con Axel Kicillof.
“El desafío que tenemos para construir la fuerza política que nos acerque más a lo que anhelamos, es construir primero una mayoría social con base en la defensa de intereses comunes”, dijo el presidente del PJ bonaerense.
Además, remarcó que “una elección se puede ganar o perder por un voto” (en un guiño al massimo que le reclama eso a Grabois), pero recordó que “Néstor (Kirchner) no ganó una elección y ahí anda tatuado en la piel y habita en el corazón de su pueblo”. Una de cal y una de arena, distender la pelea.
