Con versiones estándar, mini y nano, la última apuesta de OpenAI busca llevar las capacidades de inteligencia artificial a un espectro más amplio, adaptándose desde la nube hasta entornos con recursos limitados
OpenAI finaliza los detalles para presentar GPT-5, su nuevo modelo de lenguaje de última generación, cuya llegada está prevista para principios de agosto. Hay gran expectativa no solo porque supone la evolución directa de GPT-4 turbo, presentado en noviembre de 2023, sino porque se trata de una propuesta que viene a cubrir una pausa inusual en el tradicional ritmo de lanzamientos de la compañía fundada por Sam Altman.
El modelo GPT-5 aspira a superar a todas las versiones previas tanto en razonamiento como en comprensión del lenguaje natural y versatilidad para ajustarse a distintos dispositivos y usos.
Cómo serán las nuevas versiones de ChatGPT
Sam Altman, CEO de OpenAI, ha moderado las expectativas sobre GPT-5. En declaraciones recientes compartidas en X, Altman recalcó el carácter experimental del nuevo modelo, indicando que incorpora técnicas de investigación que la compañía utilizará en versiones futuras.
“Pronto lanzaremos GPT-5, pero queremos establecer expectativas precisas: se trata de un modelo experimental que incorpora nuevas técnicas de investigación que utilizaremos en futuros modelos. Creemos que GPT-5 gustará mucho”, indicó mediante sus redes sociales el CEO de OpenAI.
Paralelamente, OpenAI trabaja en un modelo de código abierto inspirado en el actual “o3 mini”, el cual podría ver la luz antes de que finalice julio. Sin embargo, todas las miradas se centran en GPT-5.
A nivel técnico desde OpenAI han asegurado haber incrementado la fiabilidad, precisión y eficiencia en el uso de recursos, logrando una mejor adaptación a diferentes tareas y necesidades. Esta evolución incluye la integración de capacidades de razonamiento lógica, tomadas de la línea ‘o-series’, con el vasto conocimiento general propio de la familia GPT.
Especulaciones en los medios señalan que esta versión de OpenAI llegaría en, al menos, tres variantes: la versión estándar, una denominada “mini”, más ligera, y una edición “nano” dedicada a entornos con recursos limitados. Esta última solo estaría disponible para desarrolladores a través de la API, lo que apunta a un perfil de usuario enfocado en la integración tecnológica en proyectos específicos.
Qué diferenciará al modelo GPT-5 del GPT-4
La espera para este lanzamiento ha sido más prolongada que en ciclos anteriores, lo que ha generado ansiedad e interrogantes. Jason Kwon, Chief Strategy Officer de la compañía, confirmó que GPT-5 está “cerca de completarse” y que su desempeño mejorará considerablemente en tareas de razonamiento, codificación e inteligencia general respecto a GPT-4.
Estas afirmaciones han disparado nuevas expectativas sobre el potencial disruptivo del producto, al tiempo que reactivan el debate sobre la capacidad de OpenAI para gestionar la anticipación generada.
El precedente de GPT-4 está aún reciente. Su lanzamiento supuso un avance sobre GPT-3.5, pero en algunos sectores se percibió como una transición demasiado conservadora, sobre todo en medio del auge de la inteligencia artificial generativa.
La promesa de GPT-5 es ampliar los márgenes, especialmente en interpretación contextual, ejecución de instrucciones complejas y capacidades multimodales, con la combinación de texto, imagen, audio, e incluso vídeo dentro de una misma interacción.

Lograr este objetivo conlleva retos complejos. Entrenar un modelo como GPT-5 exige recursos computacionales muy elevados, una supervisión detallada que garantice la alineación ética y la eliminación de sesgos, así como una arquitectura que logre un balance entre potencia y sostenibilidad energética.
Las voces críticas, tanto dentro como fuera del ámbito académico, subrayan la necesidad de un enfoque responsable tanto en el proceso de desarrollo como en la gestión de los crecientes recursos requeridos.
El manejo de expectativas ha resultado irregular. Desde los primeros rumores, hasta confirmaciones de retrasos y filtraciones de detalles, la información sobre GPT-5 ha llegado a cuentagotas, alimentando el ruido y la presión. Un factor que, si el producto final no responde a las ambiciosas previsiones, posiblemente se traduzca en una percepción de decepción entre usuarios y especialistas.
La llegada de GPT-5 podría acelerar los avances en asistentes inteligentes, soluciones empresariales y desarrollos tecnológicos en distintos sectores. Su impacto será visible en servicios como ChatGPT, además de aplicaciones en el ecosistema de Microsoft y plataformas de desarrollo, diseño y sistemas autónomos que requieren razonamiento avanzado.
Por ahora, la comunidad tecnológica está a la expectativa, apenas a unas semanas de conocer el alcance real de la nueva apuesta de OpenAI.
