En junio, los ingresos previsionales del sistema de la Anses experimentarán un nuevo incremento. Este ajuste responde al último informe del Índice de Precios al Consumidor publicado por el Indec
En el mes de junio jubilados y pensionados gozarán de un nuevo aumento de 2,78% en sus ingresos. Esta suba está directamente vinculada a la variación del Índice de Precios al Consumidor durante el mes de abril. En base a esta fórmula de ajuste, el haber mínimo para los beneficiarios pasará de $296.481,74 a $304.723,93 en valores brutos, mientras que el haber máximo se verá incrementado de $1.995.041,47 a $2.050.503,62.
Al mismo tiempo, el descuento por el aporte al PAMI influye sobre los ingresos netos. Así, el haber mínimo y el máximo resultarán en $295.582 y $1.936.615, respectivamente, después de efectuados los descuentos pertinentes. En este contexto, surge una medida adicional: el bono de $70.000. De esta manera, quienes perciban solamente un haber mínimo, percibirán un ingreso total de $374.723,93 en términos brutos y $365.582 de bolsillo si se suma este bono.
Además, la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM), que no requiere haber efectuado aportes, pasará de $237.185,39 a $243.779,14. Incorporando el bono de $70.000, alcanzará los $313.779,14. Cabe destacar que el bono, fijado en $70.000 desde marzo de 2024, sigue pendiente de confirmación para junio mediante un decreto ejecutivo mensual. Este bono no responde a las actualizaciones regulares, siendo su pago y valor decisiones del Gobierno.
En resumen, así quedarán los haberes de referencia:
- Jubilación mínima:
- Sin bono: $304.723,93 (bruto), $295.582 (neto)
- Con bono: $374.723,93 (bruto), $365.582 (neto)
- Jubilación máxima:
- Sin bono: $2.050.503,62 (bruto), $1.936.615 (neto)
- Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM):
- Sin bono: $243.779,14
- Con bono: $313.779,14
Según la Subsecretaría de Seguridad Social, la mitad de los jubilados y pensionados contributivos, sin acceder al bono, tendrán un aumento nominal total para el semestre de 17,38%, un índice alineado con la inflación estimada. No obstante, este aumento no logra restaurar el poder adquisitivo perdido en los años precedentes. Las pérdidas entre los jubilados que reciben solo el haber básico más el bono se calculan en un 13,7% para la primera mitad del año, reflejando una caída de entre 2% y 3% en su poder de compra real.

Desde abril de 2024, las jubilaciones se ajustan mensualmente conforme al índice inflacionario, en cumplimiento del decreto 274. Sin embargo, no se establecieron reparaciones para las pérdidas anteriores en el poder adquisitivo debido a la inflación. Según datos de LA NACION, para restaurar el poder adquisitivo de 2017, los haberes sin bono deberían duplicarse, en tanto los haberes mínimos con bono precisarían un aumento del 47%.
Más allá de los reajustes en jubilaciones, otros ingresos también experimentan un incremento de 2,78% en junio, como la Asignación Universal por Hijo (AUH). Los valores previstos serán $109.498 para menores de 18 años y $356.545 para hijos discapacitados. Cada mes se entrega el 80% de estos montos, mientras que el restante 20% se paga anualmente, sujeto a cumplir requisitos de salud y educación.
Por su parte, las asignaciones por hijo para empleados formales, estarán determinadas por el nivel de ingreso familiar y serán de $54.752, $36.932, $22.335 o $11.523. Además, se ajustan los valores de las remuneraciones mínimas y máximas para el cálculo de aportes al sistema jubilatorio, la obra social y el PAMI, que asciende a un 17% de la remuneración bruta. Dichos valores serán $102.630,97 y $3.335.458,18, generando descuentos de hasta $567.027,89 en las remuneraciones superiores.
Continuando con las actualizaciones mensuales desde abril de 2024, los aportes a cargo de los autónomos también se reajustan. El valor mensual de las contribuciones, según la ley 27.705, alcanzará $29.762,98 en junio, resultando que la adquisición de cinco años de contribuciones tendrá un costo de $1.785.778,8.
Esta serie de medidas evidencian el continuo esfuerzo por acompasar el ritmo inflacionario y mitigar su impacto en las jubilaciones y pensiones nacionales. Sin embargo, el escenario económico actual sigue representando un reto significativo para mantener el poder adquisitivo de los ingresos previsionales, en una economía donde la inflación afecta a todos los sectores.
Los ingresos previsionales siguen sujetos a ajustes que dependen tanto de decisiones económicas nacionales como del contexto global que influye en la inflación. Estos desarrollos impactarán tanto en el presente como en el futuro en la economía doméstica de los beneficiarios.
