Héctor Pinos, veterinario, explicó que la provincia cuenta con suero antiofídico y destacó la importancia de evitar el pánico ante una mordedura.
El reciente fallecimiento de José Luis Escobar, concejal de la localidad de Yatay, en Corrientes volvió a poner en debate las medidas de prevención y primeros auxilios ante ataques de especies venenosas como la yarará. En diálogo con N9, el veterinario Héctor Pinos brindó recomendaciones sobre cómo actuar en estos casos y qué errores evitar.
“La yarará habita en Corrientes, Chaco, Misiones y Formosa, por lo que estos incidentes no son casos aislados. Es importante que la gente mantenga la calma si sufre una mordedura, porque el pánico solo agrava la situación”, explicó Pinos.
Lo que no se debe hacer
El especialista remarcó que existen varios mitos peligrosos sobre cómo tratar la mordedura de una serpiente venenosa. Entre las prácticas a evitar, enumeró:
– No hacer torniquetes en la zona afectada.
– No succionar el veneno con la boca, como suele mostrarse en películas.
– No intentar capturar al animal para mostrarlo al médico, ya que esto puede provocar nuevas mordeduras.
En cuanto a medidas inmediatas, Pinos indicó que si la persona tiene pulseras, anillos o tobilleras, es fundamental retirarlas de inmediato debido a la hinchazón que se produce en la zona afectada.
Cuándo acudir al médico y cómo identificar una serpiente venenosa
Ante una mordedura, la única acción recomendable antes de llegar al hospital es lavar la herida con agua y jabón. Luego, la víctima debe acudir al centro de salud más cercano para recibir atención especializada.
“El médico es quien determinará si se aplica suero antiofídico y qué otro tratamiento puede ser necesario. No es solo el suero, sino que también pueden administrarse calmantes y antibióticos, según el caso”, señaló Pinos.
Sobre la identificación de serpientes venenosas, el veterinario aclaró que, en general, las especies de colores oscuros, como la yarará o la cascabel, suelen ser venenosas, mientras que las de tonalidades más claras, como algunas culebras, no lo son. Sin embargo, siempre se debe acudir a un médico tras una mordedura, sin importar la especie.
Stock de suero antiofídico en la provincia
Dado que el nordeste argentino es una zona con alta presencia de serpientes venenosas, Pinos aseguró que los centros de salud cuentan con suero antiofídico y que existe una red de distribución rápida para atender casos en zonas rurales o de difícil acceso.
“El suero antiofídico puede ser monovalente o polivalente, dependiendo de la especie de serpiente involucrada. Como muchas veces la persona no sabe qué animal la mordió, se utiliza el polivalente, que actúa contra varios tipos de venenos”, explicó.
Niños y adultos mayores, los más vulnerables
Finalmente, Pinos advirtió que los niños y los adultos mayores son los más afectados por las mordeduras de serpiente, debido a su menor capacidad para resistir los efectos del veneno.
“El veneno de la serpiente está compuesto por enzimas y proteínas que se expanden en el cuerpo. En niños pequeños, la concentración de veneno es mayor y los síntomas aparecen más rápido. Dificultad para respirar, taquicardia y agitación son señales de alarma que requieren atención urgente”, concluyó el especialista.
Así, ante la presencia de serpientes venenosas en el nordeste argentino, la recomendación clave de los expertos es mantener la calma, evitar medidas caseras peligrosas y acudir rápidamente a un centro de salud.
