Al igual que “Calculín”, el Coqui sigue hablando como una calculadora, inclusive en las últimas notas televisivas; lo hace mientras ensaya “su mejor versión” en una boleta bien “paladar monte-negrino”. En el otrora famoso estadio Sarmientista “Baila con su sombra” una danza de -según ÉL imposibles candidatos. Bajo su absolutista mirada: “Solo podría cerrar con Magda”, pero “como te lo sacas al Juanca” dice un conocido operador coquista refiriéndose al eterno “pintador de garitas”. En los últimos tiempos, J.C. Ayala suena como potencial candidato. Sus logros ?. Ser pareja de -alguna vez- la intendente de “la ciudad del puerto” y compartir el mismo apellido (SIC). Al mismo escenario se suman “Gustavistas” y “Peppistas” -en ambos casos- apenas prendidos frente al precipicio. Los demás presentes a la vuelta del “Decano” son algunas “las” y varios “los”, todos ellos vedados por las “les” y los “les”, siempre FIE-LES.
El General enseñó que sólo la organización vence al tiempo, pero después de 16 años de gestión y casi otros dos para reflexionar sobre los errores, el PJ aparece a ojos de la sociedad como una bolsa llena de cosas distintas, distantes, imposible de unirse (inmiscibles se dice).
Al día de hoy sólo hay una constatación: Capitanich goza de buena salud, el PJ ¡no! Quizás por eso todos parecen mirar al Coqui, aunque pocos tienen claro a quién mira el “ex ganador”, perdón… el ex gobernador.
Pero, como los nombres son los mismos, los resquemores son los mismos… muchos ya se preguntan ¿Hay vida después de Capitanich? ¿La única que queda es pedirle que acepte dos derrotas (provincial y nacional) por una banca cómoda y segura en el Senado de la Nación?
¿Qué enseñanza dejó la derrota?
A casi dos años de la fatídica caída en primera vuelta, el Movimiento no muestra soluciones ni respuestas. Recurriendo a una metáfora futbolística, digamos que el área Justicialista sigue llena de pelotas sueltas, que el Zorro -como esos goleadores implacables-, no se cansa de mandárselas a guardar. Y le dejaron suficientes para una goleada que todavía no se sabe en cuánto acaba: inseguridad, piquetes, acampes, el imposible abuso en los “planes sociales”, el empoderamiento de los “gerenciadores de la pobreza”, Emerenciano, Tito López… y siguen lloviendo temas y problemas al punto penal.
Zdero y “sus periquitos” se las siguen mandando a guardar, se lo gritan en la cara cada día, y… mientras “ellos” se besan la camiseta, en el PJ se siguen preguntando ¿Quién tiene una respuesta? ¿Quién tiene una propuesta? ¿Quién se hace cargo de algo?
Para colmo la “confederación” de intendentes y referentes locales sigue jugando con la lógica de la mezquindad: cuanto menos tienen más se acercan, cuanto más tienen más lejos se van.
Y todavía queda el dilema de las “minorías adictas”, esas que amalgaman a los propios y ahuyentan a todos los demás. Esas minorías ruidosas que suelen espantar a las mayorías silenciosas. Esos “socios, socias y socies” que tan caros terminaron por costar.
Esta semana hay que confirmar las “alianzas” ante la Justicia electoral y diez días después ¡los candidatos! y como siempre será poca el agua bendita para tantos diablos.
Merecedores, merodeadores, dirigentes con y sin gente, militantes, diletantes y atrevidos por demás, están agazapados esperando SU lugar. Sobran postulantes, lo que parece andar escaseando son los votantes y nadie quiere aceptar lo caro que puede costar otra derrota sin anestesia.
A EL NORDESTINO no se le cae una moneda pero cada tanto, si lo dejan, se le cae alguna idea y si se puede… pregunta: ¿Y si ninguno de los cabezones es candidato? ¿Y si se animan a competir a ver quién propone a los mejores? ¿Y si se desafían a trabajar juntos para imponerlos, para ayudarlos?… y ahí sí muestran quién la tiene más grande… a la capacidad de convocar y conducir, a la vocación de servir, a las ganas de ganar aunque “el diario no hable de TÍ, ni de MÍ” (Sabinisticamente hablando claro).
O a lo mejor ya irá siendo hora que algunas figuritas repetidas den el paso al costado y dejen espacio a las nuevas generaciones. Quizás nuevos dirigentes aún por conocer visto que ya hay bastante “malo conocido”… o por ahí asoman las “herederas” también, esperando la sucesión.
En fin, ¿ALGUIEN PODRÁ?.
N9
