Expertos analizan cómo las fluctuaciones hormonales y los factores sociales se combinan para impactar la salud mental durante esta etapa crítica.
La perimenopausia, una etapa de transición antes de la menopausia, representa un desafío importante para la salud mental de las mujeres. Según un estudio dirigido por el University College London (UCL) y publicado en el Journal of Affective Disorders, las mujeres en esta etapa tienen un 40% más de probabilidades de sufrir síntomas depresivos en comparación con aquellas en etapas previas de su vida reproductiva.
Qué es la perimenopausia
La perimenopausia suele comenzar entre los 45 y los 48 años, con una duración de cuatro a ocho años antes del cese definitivo del período menstrual. Durante esta etapa, las fluctuaciones hormonales, especialmente la caída del estrógeno, afectan la producción de serotonina en el cerebro, aumentando la susceptibilidad a la depresión.
El autor principal del estudio, el Dr. Roopal Desai, de la Facultad de Psicología y Ciencias del Lenguaje de la UCL, enfatiza: “Reconocer esta vulnerabilidad es clave para proporcionar apoyo adecuado a las mujeres que enfrentan estos cambios”.
Más allá de la biología: factores sociales y emocionales que influyen en la perimenopausia
La perimenopausia no solo implica cambios hormonales. Factores sociales y psicológicos, como la presión laboral, el cuidado de familiares mayores y la crianza de adolescentes, convergen durante esta etapa, creando una “tormenta perfecta” que agrava los problemas de salud mental. Yasmeen Badawy, coautora del estudio, destaca: “Estos hallazgos reflejan una problemática global que no puede atribuirse únicamente a diferencias culturales o de estilo de vida”.
Además, la estigmatización de los problemas relacionados con la menopausia limita el acceso a recursos médicos y emocionales. Esto hace que muchas mujeres no reciban la atención que necesitan.
Cómo identificar y enfrentar la depresión en la perimenopausia
Reconocer los síntomas es el primer paso para abordar la depresión en la perimenopausia. Algunos de los signos incluyen:
- Cambios frecuentes de humor.
- Trastornos del sueño.
- Pérdida de interés en actividades.
- Fatiga constante o falta de energía.
Consejos prácticos para manejar la perimenopausia
- Consultar con un profesional de la salud: evaluar las opciones hormonales y psicológicas.
- Promover la actividad física. Mejora el estado de ánimo y regula el sueño.
- Fomentar redes de apoyo. Hablar con familiares y amigos puede aliviar el estrés.
- Practicar la meditación o el mindfulness. Reduce la ansiedad y mejora la resiliencia emocional.
- Buscar grupos de apoyo. Compartir experiencias con otras mujeres en esta etapa puede ser reconfortante.
La perimenopausia es una etapa de transformación que afecta tanto el cuerpo como la mente. A medida que se profundiza en su impacto, es crucial que las mujeres, los profesionales de la salud y la sociedad en general trabajen juntos para romper el estigma y garantizar que quienes atraviesan esta etapa reciban el apoyo que necesitan. Como señala el Desai: “Proteger la salud mental durante la perimenopausia no es solo una cuestión individual, sino una responsabilidad colectiva”.