La Cancillería de Asunción aseguró que la medida fortalecerá el vínculo entre las partes y creará condiciones más favorables para el sector empresarial
Paraguay y Taiwán acordaron este viernes la supresión de visados para sus ciudadanos, una confirmación de su estrecho vínculo en medio de las recientes tensiones surgidas por la visita de un funcionario chino al país sudamericano.
Tras un encuentro con su homólogo de Taipéi, Lin Chia-lung, el ministro de Relaciones Exteriores de Asunción, Rubén Ramírez, celebró la firma del documento que, según aseguró, abrirá caminos para fomentar la relación entre las naciones, facilitará los viajes de sus ciudadanos y creará condiciones favorables para el sector empresarial.
Sobre esto último, además, Chia-lung dijo que seguirá trabajando por la aprobación de un proyecto de ley que busca reducir a cero el gravamen para el ingreso de 19 productos paraguayos en su mercado, una muestra más de la convicción de las partes por fortalecer su vínculo y no romper su alianza.
Paraguay, uno de los pocos países del mundo -y el único de Sudamérica- que aún mantiene relaciones diplomáticas con la isla, se vio envuelto en una polémica esta semana, luego de que un funcionario chino viajara al país y mantuviera reuniones con legisladores locales.
Este miércoles, el ministro de Relaciones Exteriores para América Latina de Beijing, Xu Wei, se encontró con los congresistas Éver Villalba y Billy Vaesken, y los instó a romper su vínculo con Taiwán y optar, en su lugar, por uno con su país. “Es con China o con Taiwán”, dijo, antes de mencionar las “ventajas prácticas” que una relación así podría tener, especialmente en materia comercial.
La embajada de Taipéi en Asunción manifestó su descontento por este incidente, que consideró una infiltración del Gobierno de Xi Jinping con el fin de socavar la amistad de larga data. “La República de China (Taiwán) es un país independiente y soberano (…) El régimen comunista chino no ha representado y jamás representará a Taiwán”, sostuvo la Cancillería en un comunicado en el que repudió lo ocurrido.
El ministro de Relaciones Exteriores de China para Latinoamérica conversó con legisladores paraguayos y Taiwán denunció una infiltración de Beijing con el objetivo de socavar su relación con Asunción
El Gobierno de Santiago Peña, por su parte, también accionó y definió, la víspera, cancelar el visado de cortesía extendido a Wei “por intromisión en asuntos internos”. El funcionario chino tuvo 24 horas para separarse de la delegación con la que viajaba y abandonar el país.
Asimismo, la vocera presidencial, Paula Carro, sostuvo que el vínculo con Taiwán no se verá fácilmente amenazada por iniciativas de este estilo y defendió su amistad con la isla.
“La relación de Paraguay con Taiwán es una relación de largo plazo, de largo alcance, de décadas, que está cimentada en base a valores comunes. Es una relación que se va a extender mucho más allá de este Gobierno”, dijo antes de descartar que, pese a la mención de Wei de posibles ventajas comerciales con China, “de ninguna manera” su país se dejará influenciar por esto.
“Paraguay es un gran proveedor de alimentos para el mundo y está en condiciones de proveer a todos los países del mundo y de seguir conquistando mercados a los cuales todavía no ha llegado y que están dentro del horizonte de este Gobierno”, sin temor a represalias, concluyó.
China, en tanto, criticó la decisión del Ejecutivo de expulsar a su funcionario y sostuvo que las acusaciones son “infundadas”, “injustificadas” y que “violan gravemente las prácticas internacionales”.