Luis «Toto» Caputo sigue buscando la manera de conseguir dólares extra para hacer frente a la caída de las reservas y ahora apuesta a una ayuda de los Emiratos Árabes Unidos.
Según supo LPO, en las últimas horas apareció una novedad en los sistemas de administración financiera del Ministerio de Economía que no pasó desapercibida en el mercado.
Esto es que se habilita que se pueda asentar y contabilizar la moneda de curso legal de los Emiratos Árabes, el dírham. En el mercado presumen que esto puede implicar que ingresen fondos vía Repo o Swap con ese país.
Caputo fracasó hasta ahora en todos sus intentos de conseguir un salvataje y por ahora su única apuesta real parece ser la salida del oro de las reservas para ser utilizado como caución para un préstamo, algo que es nada más que una especulación ya que Economía y el Banco Central se niegan a informar sobre el destino de los lingotes.
LPO reveló días atrás que Milei y Caputo analizan viajar a Arabia Saudita para tratar de conseguir un préstamo repo del Fondo Soberano del Reino, en una jugada geopolítica muy compleja. Pero la novedad es que la negociación con Arabia se cayó porque Riad avisó que sólo financia proyectos de la economía real o de infraestructura.
Previamente, trascendió que el ministro estaba negociando con el banco Santander un préstamo de mil millones de dólares. Antes de eso, había surgido la posibilidad de que los fondos surgieran del Banco de Basilea, lo que explicaba en principio la salida del oro del Central ya que esa entidad suele exigir respaldo en oro para conceder fondos frescos.
Todo eso luego de que Caputo chocara una y otra vez con la posibilidad de que los fondos frescos se los concediera el Fondo Monetario Internacional, al que primero le pidió 15 mil millones de dólares, luego 10 mil millones y al final 5 mil millones, todas sin éxito. Es que el FMI ya avisó que no largará un dólar extra si no hay una devaluación.
Esta necesidad de fondos frescos se da en el marco de una sangría cada vez mayor de reservas. Es que Caputo está usando los dólares del Banco Central para intervenir en el mercado, para lo cual ya se quemó 12.400 millones de dólares en ocho meses según un informe de Marina Dal Poggetto. Otro informe, de Martín Rapetti, advierte que el Banco Central terminará el año con reservas negativas por 10 mil millones de dólares.