Tras perder ampliamente en el “supermartes”, Nikki Haley puso fin este miércoles a su campaña en las primarias republicanas, con lo que el exmandatario Donald Trump quedará como único aspirante de su partido para las presidenciales de noviembre.
“Ahora es responsabilidad de Donald Trump ganarse los votos de aquellos en nuestro partido y fuera de él que no le respaldan, y espero que lo haga”, afirmó Haley este miércoles en un discurso televisado en Charleston, Carolina del Sur.
Trump fue declarado vencedor en 14 estados de los 15 en disputa el martes. Se trata de Alabama, Alaska, Arkansas, Colorado, California, Maine, Massachusetts, Minnesota, Carolina del Norte, Oklahoma, Tennessee, Texas, Utah y Virginia, según proyecciones de medios de comunicación estadounidenses. El expresidente sólo perdió en Vermont.
De esta manera, Estados Unidos se dirige hacia una presidencial en noviembre que no entusiasma demasiado, luego de que el republicano Donald Trump y el demócrata Joe Biden, grandes favoritos en sus respectivas primarias, se impusieran sin problemas en el llamado “supermartes”. Todavía resta que la convención nacional de ambos partidos nombren formalmente a los candidatos.
Qué dijo quien había quedado como la única competidora de Trump
“Ahora depende de Donald Trump ganarse los votos de aquellos dentro y fuera de nuestro partido que no lo apoyaron. Y espero que lo haga”, dijo en una comparecencia pública en Charleston, Carolina del Sur.
Haley dio por seguro que el magnate neoyorquino será el candidato del Partido Republicano a la presidencia, lo felicitó y le deseó “lo mejor”, pero no cumplió con la tradición de expresar el apoyo al ganador.
“La política se trata de atraer a la gente a tu causa, no de rechazarlos. Nuestra causa conservadora necesita urgentemente a más gente. Este es el momento de que él (Trump) elija”, resumió.
Trump se convierte, con la salida de Haley de la contienda de primarias, en el virtual nominado republicano a la presidencia a la espera de la convención del partido en julio.
La exembajadora ante la ONU era la única mujer en las primarias republicanas y la única aspirante que permanecía en pie tras el paso arrollador de Trump.
“Estoy llena de gratitud por el gran apoyo recibido en todo nuestro gran país. Pero ha llegado el momento de suspender mi campaña (…) Aunque ya no seré candidata, no dejaré de usar mi voz para las cosas en las que creo”, advirtió Haley, de 52 años y cuyos padres son originarios de la India.
Haley ha apelado en su campaña a los votantes moderados que no se sienten representados ni por Trump, de 77 años, ni por Biden, de 81 años.
Pero durante este proceso Haley solo ha ganado al expresidente en Vermont y en el Distrito de Columbia, además de sufrir una derrota humillante en Carolina del Sur, su estado natal y del que fue gobernadora.
Trump conseguirá probablemente cerrar matemáticamente su nominación la próxima semana, mientras que Biden tampoco tardará mucho dado que no tiene rivales en el Partido Demócrata.