El Tribunal Oral Federal de San Juan dispuso la detención provisoria del condenado exmilitar Gustavo Ramón De Marchi en prisión domiciliaria, luego de que trascendiera su participación el 3 de febrero en el festejo de las bodas de oro del represor Jorge Antonio Olivera, informó este viernes el Ministerio Público Fiscal.
De esta manera el juez subrogante Raúl Alberto Fourcade hizo lugar al pedido del fiscal general Francisco Maldonado, quien requirió el 7 de febrero que se efectivice una resolución de la Cámara Federal de Casación que había anulado el apartamiento del proceso dispuesto tiempo atrás por el Tribunal Oral a raíz de «supuestos problemas de salud».
El desencadenante de la solicitud del fiscal fue la publicación de una foto del condenado De Marchi cuando participaba junto a su esposa de la fiesta de 50 años de casado que hizo su excamarada del Ejército Olivera, también condenado a prisión perpetua.
La celebración se hizo en el mismo lugar donde este último cumple prisión domiciliaria, por lo que actualmente también se investiga si Olivera violó las condiciones en que debe pasar su presidio.
Maldonado refirió en su escrito que si bien De Marchi se encontraba en libertad al momento de la fiesta porque el tribunal oral había dictado la suspensión de la ejecución de dos condenas por delitos de lesa humanidad por razones de salud, esa orden había sido anulada por la Sala III de la Cámara Federal de Casación el 6 de julio de 2023.
La detención «provisoria» del condenado en prisión domiciliaria resuelta por el juez Fourcade es una medida temporaria, que se ejecutará mientras analiza los pedidos contrapuestos del fiscal -que pidió la ejecución de la condena- y de la defensa de De Marchi, que requirió que el tribunal oral disponga la suspensión de la pena en razón de problemas de salud.
Según lo informado por el Ministerio Público Fiscal, el juez fundó la detención provisoria en prisión domiciliaria en los últimos peritajes médicos realizados a De Marchi, que datan del 21 de septiembre de 2022.
Fourcade fijó una serie de condiciones para la detención provisoria del exmilitar, como residir en el domicilio fijado en el expediente sin trasponer los límites catastrales de ese domicilio y solicitar autorización previa al tribunal para efectuar cualquier salida.
También le indicó realizar trámites personales a través de un apoderado y «abstenerse de desarrollar actividades lucrativas o profesiones dentro del domicilio».
Asimismo, el magistrado ordenó el control de la vivienda de De Marchi mediante rondines policiales y contactos telefónicos, así como «el permiso de acceso de los efectivos al lugar cada vez que lo estimen pertinente».
El Tribunal de San Juan ordenó además esta semana la reevaluación médica del estado de salud de De Marchi solicitada por la fiscalía a los efectos del artículo 77 del Código Procesal Penal de la Nación -que prevé la posibilidad de suspender el proceso por razones de salud- y que «se requiera a los peritos intervinientes que evalúen específicamente la posibilidad de que haya existido una simulación de afecciones por parte del nombrado».