«Italia hace una elección precisa en política exterior, que conducirá a reservar un lugar de honor para África en la agenda de nuestra presidencia del G7», afirmó Meloni al abrir la cumbre «Italia-África. Un puente para un crecimiento común» que se desarrolla en el Senado italiano.
Para la premier, Italia está «comprometida a demostrar que somos conscientes de cuán interconectados están los destinos de nuestros continentes».
El eje central de la conferencia es la cooperación en materia de inmigración el denominado Plan Mattei, una iniciativa italiana para lograr mayor desarrollo africano y desincentivar así la partida de personas hacia Europa.
«El Plan Mattei puede contar con 5.500 millones de euros entre créditos, operaciones de donación y garantías», afirmó, Meloni.
En detalle, la premier indicó que algunas de las propuestas de la iniciativa son «un gran centro de formación profesional sobre energías renovables en Marruecos, proyectos de educación en Túnez, otros de accesibilidad a la asistencia sanitaria en Costa de Marfil», además de proyectos en Argelia, Mozambique, Egipto, República del Congo, Etiopía y Kenia.
Los presidentes de la Unión Africana, Azali Assoumani; y de la Comisión de la Unión Africana, Moussa Faki Mahamat; además de la titular del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, y del vice secretario General de las Naciones Unidas, Amina Mohammed; son algunos de los participantes de la conferencia.
«La Cumbre es el primer evento internacional que tiene lugar en Italia desde el inicio de la Presidencia del G7, lo que demuestra la importancia que Italia otorga a la asociación con las naciones del continente africano», planteó Meloni durante la apertura de este lunes.
«De hecho, es la primera vez que la Conferencia Italia-África, que hasta ahora se ha desarrollado a nivel ministerial, es elevada al rango de Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno», agregó la premier.