Los cambios que aceptó Javier Milei a la Ley Ómnibus no son suficientes para conseguir, por ahora, el respaldo de los bloques aliados que siguen reclamando que no haya un aumento a las retenciones al maíz, trigo, carne y derivados de la soja.
El presidente cedió únicamente en mantener en 0% las retenciones a las economías regionales y no tendrá facultades para seguir aumentando por decreto, pero mantuvo el grueso de las subas que los gobernadores de Juntos rechazaron por completo, como contó LPO.
Fuentes del PRO, el radicalismo y el bloque federal que conduce Miguel Pichetto coincidieron a LPO que no están dispuestos a votar la suba de retenciones al maíz, trigo, carne, derivados de la soja y la industria, además de la minería y los hidrocarburos.
En esas bancadas dicen que por ahora el acuerdo está trabado no sólo por las retenciones, pero principalmente por eso. En el radicalismo también pedían la eliminación de las modificaciones en cultura y medio ambiente, pero el Gobierno sólo aceptó cambios. También hay dudas con la posibilidad de la privatización parcial de Banco Nación, Arsat y Nucleoeléctrica. Otro reclamo opositor era que no se liquide el Fondo de Garantía de Sustentabilidad, pero el gobierno no aceptó.
Un tema no menor también es el de las retenciones al vino. En Mendoza tenían una promesa de que se eliminaría la retención del 8% establecida en el proyecto de ley, pero el texto que difundió el Gobierno no establece eso. Allí se habla de la eliminación de las retenciones a las economías regionales (modifica el artículo 206), pero no se habla de la eliminación del artículo 205 que establecía la alícuota para el vino y el aceite de limón. En Mendoza afirman que el vino fue incluido en el listado de las regionales exentas, pero al menos por ahora el Gobierno no elimina el artículo.
El tema es importante especialmente para Alfredo Cornejo, que se había corrido de la pelea por la Ley Ómnibus con la promesa de que eliminarían ese artículo. El gobernador de Mendoza fue parte de la reunión de este domingo y dejó claro su rechazo a las retenciones, lo que daba un indicio de que acaso su parte del acuerdo no se estaba cumpliendo. En la provincia cuyana están convencidos de que las retenciones al vino fueron sacadas del proyecto.
La férrea postura del PRO, la UCR y el bloque federal contra las retenciones es respuesta a un mandato de los gobernadores (que fue ratificado en el zoom del domingo), pero también un mecanismo de defensa para evitar las rupturas internas ya que hay muchos diputados en las tres bancadas que no votarán la suba.
Los casos más públicos son los de los cordobeses de Schiaretti y Llaryora y los socialistas santafesinos que integran el bloque de Pichetto. Pero también los radicales santafesinos que responden a Pullaro e integran la UCR no van a acompañar. Lo mismo sucede con muchos diputados sueltos del PRO.
Pero al mismo tiempo el tema ya trasciende a la cuestión de la ley en sí misma y pasa a una cuestión política, con los gobernadores de Juntos decididos a marcarle un límite a Milei. Como adelantó LPO, los mandatarios están dispuestos a dar la pelea en la opinión pública ante la amenaza de Milei de hacerlos pagar el costo político. Al respecto, creen que estas «cesiones» difundidas por el Gobierno son parte de la estrategia para victimizarse si la ley no sale.