El principal acusado del crimen de Lara Fernández, la adolescente de 17 asesinada de un disparo en la nuca el 1° de enero de 2022 en medio de un robo en Lomas de Zamora, se escapó por segunda vez de la insitutición de menores en la que está alojado.
El sospechoso, apodado “Martincito”, actualmente tiene 17 años y estaba alojado en el Instituto de Menores Legarra, en la localidad bonaerense de La Plata, a donde había sido trasladado el viernes, según pudo saber TN.
Un día después, el menor se escapó y este domingo los vecinos del barrio lo vieron circulando en un vehículo. “Todo esto genera mucha impotencia”, expresó Laura Fernández, la mamá de la víctima a este medio.
Es que se trata de la segunda vez que “Martincito” escapa del lugar en el que estaba alojado. La vez anterior fue en octubre de 2022 y de otro centro de menores de La Plata. En los días que estuvo prófugo cometió una tentativa de homicidio por la que fue condenado en un juicio abreviado en los tribunales de San Isidro a 5 años de prisión.
Por el crimen de Lara Fernández, “Martincito” no fue juzgado porque al momento del hecho tenía 15 años y era inimputable.
El segundo escape de “Martincito”, el terror de Lomas de Zamora
“Estuvo en un instituto hasta el viernes, ese día lo trasladaron a Legarra, y el sábado se escapó. Cruzó un alambrado y salió, tan sencillo como eso”, explicó Laura con impotencia.
Además, detalló que tras huir del lugar, el menor llegó hasta Lomas de Zamora en un auto Gold Trend blanco, del cual se desconoce su procedencia. Según ella, fueron los vecinos quienes lo vieron por la zona y le avisaron.
Luego de ser alertada, se comunicó con el fiscal local, quien llamó al instituto para confirmar los rumores. “Le dijeron que no se había escapado y que lo habían trasladado el lunes”, detalló. “Era mentira, pasó a buscar a la novia como si nada, entonces la mamá de la chica hizo la denuncia y me avisó que se había ido con él. Yo volví a contactarme con el fiscal, que llamó otra vez al instituto y ahí le confirmaron que sí se había escapado”.
“Aparentemente tuvo problemas en el instituto anterior, parece que apuñaló a uno, prendió fuego un colchón y entonces lo trasladaron a este centro que es abierto, que tiene solamente un alambrado. Se lo sacaron de encima y después se escapó”, lamentó.
“Estamos viendo cómo se va a mover con respecto a este tema. Él tenía una condena firme porque cometió un intento de homicidio en San Isidro. Sé que fue algo grave porque se hizo un juicio abreviado y le dieron cinco años porque ya tenía más de 16 años”, explicó.
El acusado deberá transitar su condena en un instituto hasta los 18 años y cuando cumpla la mayoría de edad pasará a un centro intermedio donde se alojan los menores punibles. “En mayo lo iban a trasladar por este hecho, pero por el caso de Lara él no iba a tener condena porque tenía 15 años y no se lo puede juzgar. No lo pueden condenar aún sabiendo lo que es para la sociedad”, cuestionó Laura.
En este sentido, la madre de la víctima reveló que un mes después del crimen de su hija, “Martincito” asesinó a un hombre en Laferrere, pero que su familia decidió no hacerlo público por miedo a represalias. “Cometió dos homicidios y no pudo ser condenado, recién lo fue por lo que pasó en San Isidro y te da mucha impotencia, es triste, no solamente por mí, sino para otras familias que pasan lo mismo”, señaló.
“Nadie hace nada, todos hablan de cambio de ley, de imputabilidad, pero nadie hace nada y te da impotencia que ni el Estado ni la Justicia te acompañan”, lamentó y sumó: “Te da rabia saber que está por la calle, que puede cometer otro hecho igual. Tengo que estar esperando que arruine otra familia para que hagan algo”.
En su escape anterior, en octubre de 2022, el menor acusado estuvo robando a pocas cuadras de la casa de Laura e inclusive pasó por el frente de su vivienda. “No tiene un sustento monetario entonces vuelve a salir a robar”, señaló la mujer y añadió. “Yo no le tengo miedo. En algún momento hizo comentarios sobre mí porque dijo que estaba preso por culpa mía, porque soy una vieja metiche y no por el hecho que él había cometido”.
Ante esto, Laura sostuvo: “Yo soy personal policial, a mi me da miedo que este tipo de personas estén sueltas por el resto, pero no por mí. Da bronca e impotencia que esté suelto robando o matando por un celular”.
A dos años del crimen de su hija, que en aquel entonces tenía tan solo 17 años, Laura habló sobre su vida hoy. “Tenés que tener ganas todos los días de levantarte, de hacer justicia, de pelear para que se haga algo. Hoy vivo con un dolor enorme que no se va con nada y al dolor se le suma la bronca y se vuelve como a revivir todo lo sucedido ese día. Genera mucha impotencia porque no podés entender que se fue cruzando un alambrado, es una cargada”.
El crimen de Lara Fernández
Lara Valentina Fernández, de 17 años, fue asesinada el sábado 1° de enero de un balazo en la nuca al resistirse a un robo en la localidad bonaerense de Lomas de Zamora.
El hecho ocurrió en la esquina de Olmos y Homero. Allí, Lara se encontraba reunida en la calle con un grupo de amigos festejando Año Nuevo cuando cuatro delincuentes armados los interceptaron para robarles.
Según relató un joven de 19 años que se encontraba con el grupo de adolescentes, los asaltantes les sacaron sus cosas, pero la joven se resistió. En ese momento uno de los delincuentes le dio un culatazo a la chica y luego se escuchó un disparo. Ahí advirtieron que Lara había recibido un balazo en la nuca, mientras los ladrones escapaban del lugar.
Horas después del crimen detuvieron a Cristian “Chula” Maidana, de 23 años. El 28 de marzo de ese año atraparon a Alan Benjamín González Ávalos, de 22.
El último en caer fue Leandro Nicolás Strassera, de 21 años. Por él, el Ministerio de Seguridad bonaerense ofrecía una recompensa de $5.000.000, pero resultó que estaba preso en una comisaría desde hacía tiempo por un asalto. Tenía un nombre y DNI falso. Estos tres delincuentes que participaron del robo aún permanecen detenidos.