Ya no quedan más acciones para enfriar la relación con China. Luego del gesto del diputado provincial Agustín Romo que fue a recibir 300 pan dulces de Taiwán en la previa de la navidad tras la decisión de Xi Jinping de rechazar la ampliación del Swap, ahora la canciller Diana Mondino recibió a la representante taiwanesa, Miao-hung Hsie.
En que significa un hecho inédito en la historia de la diplomacia argentina, la Canciller rompió la tradición diplomática y se reunió en el Palacio San Martín con Hsie en una clara provocación que puede afectar sensiblemente el acceso a financiamiento y la postura que Argentina sostiene como es el principio de integridad territorial con el que el país defiende la soberanía de Malvinas y el principio de una sola China.
El Gobierno viene de abandonar los BRICS, bloque en el que el país ingresó gracias a la gestión de Xi Jinping, y abandonó Unasur, como reveló LPO.
Pero además de cruzar todas las líneas rojas que establece Pekín, el posicionamiento de los libertarios genera fuertes tensiones internas. Como anticipó en exclusivo LPO, en la reunión que mantuvo el enviado de Xi Jinping el pasado 11 de diciembre en la Casa Rosada, la preocupación de los chinos es la desconexión entre el equipo económico que lidera Toto Caputo y Mondino.
El ministro de Economía es partidario de utilizar el swap para pagarle al FMI e incluso fue parte de la gestión de ampliación del financiamiento chino durante la presidencia de Macri, pero choca con el mal disimulado tono anti China de la canciller de Milei.
Con el rechazo de la ampliación del financiamiento chino, Milei tuvo que acudir a un crédito de la CAF, con fuerte influencia del Brasil de Lula, y ahora enfrenta vencimientos por 57,5 billones de pesos en 2024, una cifra equivalente a los 71 mil millones de dólares. Ante el fracaso del Bono para la reconstrucción de una Argentina libre, Luis Caputo busca recuperar su reputación ante el sistema financiero.
Como publicó LPO, Toto quedó golpeado tras el revés en la colocación del BOPREAL en su primera jugada como funcionario. La credibilidad en los mercados es la única cualidad que puede darle sobrevida a un ministro de Economía.
Pero la interna no solo alcanza al equipo económico sino también al universo diplomático que está entre sorprendido y enojado por este nuevo posicionamiento al que califican como «irresponsable y dañino».
Esto abre una grieta dentro del oficialismo y empuja a los dirigentes más cercanos a Mauricio Macri en el dilema de intervenir. Esto pone en duda la continuidad de Mondino y hace crecer la posibilidad de Federico Pinedo como Canciller apoyado por diplomáticos y el PRO. Sin embargo, Mondino todavía tiene el respaldo de Milei.
En Taiwan aprovechan este inesperado viento de cola y en un reportaje publicado el domingo, la representante comercial dijo: «Quiero trabajar junto con el nuevo gobierno argentino para fomentar nuestra relación. China siempre presiona a los gobiernos argentinos para que no tengan contacto con Taiwán. Pero, como el gobierno de Javier Milei apoya los valores universales de libertad y democracia, así como el respeto de los derechos humanos y el orden internacional, compartimos un lenguaje común».
«Tengo esperanza y confianza en que podamos trabajar juntos. Si hay voluntad de las autoridades argentinas, entonces también habrá interés de los inversores taiwaneses por invertir en el país», agregó.
Para China, según los informes oficiales recogidos por la embajada en Argentina del pasado 4 de enero, el alineamiento internacional de Javier Milei cruzó los límites de lo esperado y ubican al libertario cerca del ucraniano Volodimir Zelenski.
En Cancillería negaron a LPO la existencia de la reunión, sin embargo, las fuentes consultadas dan por hecho el encuentro y aseguran que el gobierno quiso hacerla en secreto pero se filtró por las diferencias internas.
«Es increíble que lo sigan negando. No se puede tapar el sol con la mano, están asustados porque Mondino se mandó una grande», agrega la fuente.
El esfuerzo para evitar la reunión también involucró a sectores comerciales con intereses en la relación bilateral que, enterados de la aceptación de Mondino de recibir a la representante de Taiwán, intentaron alertar sobre «el quilombo que podría generar». No lo lograron.