El aumento del impuesto de ganancias para los trabajadores que Milei anunció por cadena nacional, sorpresivamente no se incluyó en la ley omnibus que el presidente envió este miércoles al Congreso.
La ausencia abrió especulaciones sobre negociaciones subterráneas con los gobernadores. Tenía lógica. Fue el motivo central de la cumbre de Milei con los 24 mandatarios, que le explicaron que ellos no iban a aceptar que el gobierno les transfiera el costo por reponer ganancias, que su propuesta era coparticipar el impuesto al cheque, y que si quería que analicen apoyarlo, empiece por poner la cara y explicarle a la gente que se trataba de una iniciativa del gobierno. Por eso, Milei hizo la cadena.
Pero después no paso nada. «Es insólito, nadie del gobierno llamó a los gobernadores, ni siquiera a los que están apoyando, como los de Juntos por el Cambio», explicó a LPO el vocero de un gobernador del PRO, que hizo un par de gestos públicos en favor de Milei y recibió como respuesta el silencio.
El ministro Toto Caputo intentó justificar este jueves la demora. «Estamos calculando las escalas, queremos aumentar la base imponible», dijo el ministro en una charla con unos pocos periodistas elegidos a dedo por el Palacio de Hacienda. «Todos quieren un país mejor y nadie quiere hacer un carajo, es el impuesto mas progresivo del mundo», se defendió.
Caputo no precisó cuando ni como se avanzará con este tema, pero voceros de la Casa Rosada confiaron a LPO que la idea es enviarlo como un proyecto separado de otras iniciativas, pero lo cierto es que para avanzar con la sanción es condición necesaria asegurar el acuerdo con los gobernadores.
Lo extraño, que ya deja de serlo porque se repite en otras iniciativas claves del gobierno como el mega decreto o la ley omnibus, que nadie del gobierno está trabajando para conseguir los votos en el Congreso.
Esto pese a que para el ajuste que intenta concretar Milei, volver atrás con las modificaciones de ganancias que Sergio Massa logró que sancione el Congreso, es un tema central.
El costo fiscal de la medida de Massa fue de $2,9 billones y de ese total, $1,7 billones corresponde a las provincias, según calculan los gobernadores.
Sin embargo los gobernadores peronistas este miércoles en una visita que hicieron al Senado, reiteraron que no apoyan reponer ganancias a los sueldos. «Afecta el derecho de los trabajadores», sostuvieron y recordaron que ya presentaron un proyecto de ley que propone la coparticipación del 70% del impuesto al cheque como «mecanismo de compensación».
Pero Milei lo rechazó de plano. «Está claro que no vamos a coparticipar el impuesto al cheque. Está claro que las provincias hoy tienen un déficit de 1 punto del PBI. No vamos a modificar nuestra política de déficit cero, es inamovible. Volver a introducir Ganancias es la solución que permite que las provincias puedan encauzar sus cuentas», afirmó en una entrevista con Radio Rivadavia.