Asimismo, a través de un comunicado, remarcó la necesidad de fortalecer los cuidados para prevenir la enfermedad y evitar el aumento de casos tras haberse registrado «una curva epidemiológica ascendente en todo el país durante las últimas 4 semanas» que motivó una «alerta epidemiológica» por riesgo de propagación de la enfermedad.
Y, resaltó que la abundancia de lluvias y altas temperaturas generan condiciones ambientales favorables para la proliferación del mosquito vector; el Aedes aegypti.
Por eso, recordó que luego de las precipitaciones es fundamental vaciar todo tipo de recipiente que acumule agua para evitar su propagación.
Salud señaló que el Aedes aegypti tiene hábitos domiciliarios y se reproduce en cualquier recipiente natural o artificial que contenga agua. Sus huevos pueden resistir las condiciones ambientales secas durante más de un año, siendo ésta una de las estrategias más importantes que la especie emplea para sobrevivir y propagarse.
Por esta razón, las medidas de prevención más efectivas apuntan a la eliminación de objetos que puedan acumular agua, especialmente aquellos que quedan a la intemperie y acumulan agua de lluvia, y el control de aquellos contenedores de agua necesarios (tales como los bebederos de animales, botellas, entre otros).
En este sentido, el ministerio desarrolla estrategias de descacharrado en conjunto con municipios bonaerenses, en el marco del “Plan de Preparación y Respuesta frente al Dengue y otros arbovirus 2023-2024”, con actividades que apuntan a promover medidas tendientes a reducir la población del Aedes aegypti.
Entre las principales tareas de prevención en los hogares, recomendó eliminar criaderos potenciales de mosquitos mediante tareas de descacharrado y descartar todos los objetos inservibles que puedan acumular agua de lluvia, como latas, botellas vacías, neumáticos, macetas.
En cuanto a los recipientes útiles, como baldes y palanganas, es necesario vaciarlos y dejarlos boca abajo para que no junten agua, las canaletas deben mantenerse limpias y libres de hojas todo el año, en el caso de los recipientes utilizados para contener agua (como tanques y barriles) es importante mantenerlos tapados, y el agua de bebederos de animales y de floreros deben ser renovada cada tres días.