Javier Milei aseguró que los caceroleros que se manifestaron durante la noche del miércoles «sufren el síndrome de Estocolmo. Básicamente están abrazados y enamorados del modelo que los empobrece». El presidente adelantó que tras el megadecreto de desregulación del Estado habrá «más» reformas.
Tras las protestas, Milei consideró que los caceroleros no representan a la «mayoría de los argentinos»: «Hay gente que mira con nostalgia, amor y cariño al comunismo también», ironizó. Horas antes, el ideólogo del megadecreto, Federico Sturzenegger, también se había burlado de la gente que protestó.
Milei anunció que convocará al Congreso a sesiones extraordinarias para avanzar con nuevas reformas. «Pronto se van a enterar, vamos a mandar un proyecto de ley que contiene aspectos sobresalientes en lo que tiene que ver con el funcionamiento del Estado», dijo.
En una entrevista con Radio Rivadavia, el presidente destacó la ponderación que hizo Marcos Galperín de sus anuncios. «Te mintieron durante 80 años y te dijeron toda la verdad en 10 minutos», había escrito el CEO de Mercado Libre.