El vocero del Departamento de Estado estadounidense, Matthew Miller, precisó que Estados Unidos «daría la bienvenida a que (los rusos) negociaran de buena fe».
«Hay una oferta sustancial que hicimos hace apenas unas semanas», dijo el vocero en conferencia de prensa y subrayó que Moscú había «rechazado siempre» todas las ofertas que se le habían hecho, si bien Putin había dicho previamente que esperaba un acuerdo sobre este tema.
«Daríamos la bienvenida a que se involucraran seriamente con nosotros», señaló Miller, informó la agencia de noticias AFP.
Miller respondió así a Putin, quien previamente, durante su gran conferencia de prensa anual, había manifestado que quería «llegar a un acuerdo» y que debían «ser mutuamente aceptables y convenir a ambas partes».
«Estamos en contacto con nuestros socios estadounidenses sobre este tema. No es fácil, pero en general creo que nos entendemos. Espero que encontremos una solución», agregó el mandatario.
Entre los detenidos están Evan Gershkovich, un periodista del diario The Washington Post acusado de espionaje, y el exinfante de Marina Paul Whelan.
El comentario de Putin se produce horas después de que un tribunal ruso rechazara una apelación y ratificara la prisión preventiva, hasta fines de enero próximo, del periodista estadounidense Evan Gershkovich, arrestado en marzo pasado por presunto espionaje, un delito por el que se expone a hasta 20 años de prisión.
Este periodista, de 32 años, trabaja para el diario The Wall Street Journal y fue detenido por los servicios de seguridad rusos durante un reportaje en Ekaterimburgo, en los Urales, el 29 de marzo pasado.
Desde entonces permanece recluido en la prisión de Lefortovo en Moscú.
Rusia nunca fundamentó sus acusaciones ni presentó públicamente pruebas, y todo el procedimiento se ha mantenido en secreto, sin que se conozca todavía la fecha del juicio.
En los últimos años, varios ciudadanos estadounidenses fueron detenidos y condenados a largas penas en Rusia, y Washington acusa a Moscú de querer canjearlos por rusos detenidos en Estados Unidos.
Otro de los detenidos es el exmarine Paul Whelan, de 50 años, que en diciembre de 2018 fue arrestado en la habitación de un hotel en Moscú, donde se le encontró un dispositivo de memoria en el que almacenaba secretos de Estado, y se le dictó una sentencia de 16 años de prisión.